martes. 16.04.2024
Valdeorras, Viana do Bolo y Trives cuentan con 25 misioneros en todo el mundo

Las 254 parroquias pertenecientes a la Diócesis de Astorga en las comarcas de Valdeorras y Trives (repartidas en los arciprestazgos de O Barco y A Rúa) se suman este domingo a la celebración de la Jornada Mundial de las Misiones, el popular Día del DOMUND, y que con el lema 'Seréis mis testigos' pretende reconocer la labor que realizan los 25 misioneros procedentes de esta zona y que están repartidos por todo el mundo.

Estos 25 misioneros forman parte de 278 misioneros en la Diócesis de Astorga (175 mujeres y 103 hombres), 129 de Astorga, lugar que, junto a Zamora con 86, más misioneros posee.

«Se siguen necesitando muchos misioneros y es de justicia que todas las iglesias y vocaciones sean atendidas. En esta campaña del Domund, se nos pide oración y colaboración económica. En 2013, los donativos en la Diócesis de Astorga alcanzaban los 180.000 euros y en 2021 fueron de 98.000 euros, vamos para atrás», destacó Loli Rodríguez, coordinadora de la delegación de Misiones de la diócesis de Astorga.

Durante estos días, la diócesis está siendo visitada por un misionero, el padre burgalés Daniel Cerezo quien ingresó con 23 años en los Misioneros Combonianos y fue ordenado sacerdote en 1981. Tras trabajar en el norte de Uganda con los acholis, fue destinado a Macao (China), y desde llevó a cabo varios proyectos de ayuda humanitaria en favor de los más necesitados. Ha publicado numerosos artículos sobre China, en particular sobre la situación de los cristianos.

Daniel Cerezo ha destacado la importancia de compartir la experiencia misionera. “Lo hago siguiendo el lema de este año “vosotros seréis mis testigos”, uno es testigo a través de los ojos, de los odios y de la boca para que viendo lo que hemos escuchado lo contemos”, ha explicado, reconociendo que, por ejemplo, los cristianos en China viven una situación de persecución por eso resulta tan impactante ver cómo dicen que su Fe es innegociable y como valoran ese tesoro. “Son mártires vivientes”.

Valdeorras, Viana do Bolo y Trives cuentan con 25 misioneros en todo el mundo