La sucesión de titulares sobre enfermedades animales ha abierto un debate en la comarca: ¿hay riesgo real para las familias?, ¿pueden verse afectadas las mascotas?, ¿qué consecuencias está dejando en el sector? Para responder a estas preguntas, el veterinario Adolfo García, del Centro Veterinario O Sil, pasó por Más de Uno Valdeorras y dejó un mensaje claro: preocupación, sí; alarma, no.
La gripe aviar fue el primer asunto sobre la mesa. García explicó que el virus sigue activo en Galicia, con focos detectados en aves silvestres en las Rías Baixas, las Rías Altas, aunque la situación es estable: «Hasta la fecha no se ha detectado ningún caso en aves domésticas», subraya.
Las medidas de prevención han obligado a recluir a las aves para evitar contagios y esto ha tenido repercusiones en los pequeños productores: «Hubo que recluir a las pobres gallinas y eso repercute en la economía del sector», explica. El estrés de los animales afecta a la producción y la subida del precio de los huevos también salió a relucir, aunque el veterinario no quiso entrar en valoraciones económicas: «Ahí estamos abriendo un melón muy complejo».
En cuanto a los riesgos para las personas, García recuerda que la gripe aviar sí es una zoonosis, pero el contagio es extremadamente raro y se limita prácticamente a trabajadores que manipulen aves enfermas. También las mascotas podrían contagiarse, aunque la probabilidad es muy baja si se mantienen las medidas de control.
Peste porcina africana: «El riesgo no es para las personas, es económico»
El segundo foco informativo fue la peste porcina africana, detectada recientemente en jabalíes de Cataluña. García aclaró que, a diferencia de la gripe aviar, esta enfermedad no afecta al ser humano: «Podríamos consumir carne y embutidos tranquilamente», detalla.
El peligro está en las explotaciones: «La consideración económica es muy importante», señala. Si el virus entra en una granja, puede propagarse rápidamente. Los animales afectados deben sacrificarse, incluso aquellos que sobreviven, porque «pueden ser sospechosos de contagio».
La proliferación de jabalíes en todo el país incrementa la posibilidad de expansión. Sobre la hipótesis del bocadillo contaminado como origen del foco, fue claro: «No es algo rarísimo ni impensable. Sí podría ser un foco de contagio».
Navidad y mascotas: «Una mascota es una responsabilidad, no un regalo impulsivo»
Con las fiestas a la vuelta de la esquina, García quiso destacar un mensaje que cada año repite: tener una mascota implica un compromiso real. «Cuando uno adquiere una mascota, hay que tener muy claro que estamos adquiriendo una responsabilidad», recuerda. Además de cuidados básicos, se necesita disciplina, conocimiento del comportamiento animal y asumir gastos sanitarios.
En consulta, asegura encontrarse con casos de animales «absolutamente descontrolados» por falta de orientación. De ahí su recomendación: asesorarse siempre. «Estaremos encantados de explicar cómo, cuándo, por qué y qué es lo mejor», afirma.
Aunque no dispone de datos estadísticos exactos, la experiencia clínica le permite ver una tendencia clara: «Creo que los gatos ganan terreno». Las razones, según explica, combinan comodidad y ritmo de vida: «La gente está más ocupada. En las familias en las que trabaja todo el mundo, no hay tanto tiempo para sacar al perro».
El gato, en ese sentido, se adapta mejor, aunque insiste en que «un gato no es un perro pequeño» y requiere cuidados y comprensión de su carácter.
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