Con mucha ilusión en el inicio de este nuevo curso escolar, marcado por la vuelta a la normalidad, los alumnos y profesores del colegio Conde de Fenosa de O Barco ya están inmersos en nuevos proyectos que llevarán a cabo a lo largo del año y un nuevo curso donde miman la calidad de sus propuestas.
La directora del centro, Carmela García, relata algunas de las claves que han permitido crear un clima de confianza y de bienestar en las aulas educativas de este centro, que atesora rincones especiales como la biblioteca, donde muchos alumnos se acercan por primera vez a la lectura.

«A biblioteca é o corazón do noso colexio, de feito hai moitas actividades que versan ó redor dela. Tvemos clubes de lectura, tanto para nenos como adultos e imos seguir tendo», resume Carmela García quien presume desde su despacho "da mellor profesión do mundo». Ella sabe mejor quien nadie la importancia del contacto con alumnos para su futuro.

Esto se podía constatar en este arranque de curso donde la biblioteca se han convertido en un hervidero de alumnos realizando todo tipo de tareas.

En lo que respecta a este inicio de curso, García subrayó la normalidad de este curso, donde los alumnos tendrán la oportunidad de participar en dos proyectos de formación uno digital y otro de ahorro energético pero también de su amplio abanico de extraescolares.

«Retomamos tamén as actividades extraescolares, como contacontos pandeireta e canto, ioga, zumba, artes plásticas», una amplia oferta a la que hay que sumar «inglés, novas tecnoloxías e xogos deportivos»; apunta García.

Aunque si de algo presumen en el Condesa de Fenosa es de su biblioteca, un espacio donde los niños comparten experiencias, se sienten escuchados y aprenden a ser «bos lectores» y aprendan a «comprender o que len» y conocer de primera mano estrategias para su formación. La máxima que impera allí es « que sexan lectores e saiban contrastar e elexir información e comprender».

Xaquín, responsable de la biblioteca, destaca la oportunidad que tienen los alumnos para adentrarse en su funcionamiento hasta ser verdaderos ayudantes de biblioteca.

Los niños coinciden en su ilusión de poder retomar los estudios y volver a ver sus compañeros. Ganas no faltan. Algunos de sus alumnos, Rubén, Pablo, Leo, Borja coinciden en sus ganas de vivir este curso. Con sus profesores, trabajan en habilidades matemáticas algo que comparten con otras tareas como es elaboración de platos con la huerta del centro.