viernes. 29.03.2024
Isabel Gavela recomienda "Los colores del tiempo" de Ana Alonso

En "Los colores del tiempo", Ana Alonso nos sitúa a finales de la década de 1940, sin renunciar a la critica política y social. La historia empieza en 1948, en plena posguerra. Recrea la época con gran realismo a través de la experiencia de Adela, una maestra que llega a León destinada desde Barcelona porque no es del agrado de los inspectores del Régimen.

Ella, que era una obrera en una de las muchas fábricas de la ciudad, estuvo desde el inicio de la contienda en la lucha por la la educación y la igualdad de las mujeres. Como es una luchadora, a pesar de las circunstancias, pronto vuelven a cambiar su destino para enviarla junto con su hija a un pueblo en la montaña. Ella sabe  que está en el punto de mira, que todo lo que haga o diga se examina, y en esa situación intenta pasar lo más desapercibida posible sin conseguirlo.  Para ella lo peor es la impostura, y a eso no se acostumbra.

Para Adela, encajar en la sociedad provinciana de León, en el ambiente cerrado y asfixiante de un pueblo de montaña o en el Madrid gris de escombro resulta doloroso. No se adapta a vivir en la sospecha, a que la miren de reojo o a mantenerse siempre en guardia frente a los delatores mientras los suyos se consumen en la guerrilla o se colocan la máscara del Régimen y piden «té especial» en las cafeterías de moda.

Para ella, que nació obrera en Barcelona y luchó en la defensa de la ciudad por un mundo más justo e igualitario. El deseo de revolución late en la maestra, en la lectora compulsiva, en la costurera, en la madre imperfecta, en la mujer cuya vida se truncó en el Pirineo un día del año aciago en el que se perdió la guerra. Nunca comprendió lo ocurrido ese triste día en el que se separó de sus compañeros hasta que una novela romántica ,

“Una mancha de carmín” llega a sus manos. El misterio que está novela le desvela tiene mucho que ver con su anterior vida, con Carmen y Enrique, antiguos compañeros de partida y con aquella revolución soñada.

Pero en medio se encuentra su nueva vida, y la de su hija, y la de aquellos que un día fueron,  y ahora son otras personas, llevan otras vidas que Adela nunca podría sospechar.

Isabel Gavela recomienda "Los colores del tiempo" de Ana Alonso