Galicia registró el otoño más cálido y más húmedo de la serie histórica, según el avance del informe climatológico elaborado por Meteogalicia.
Este período se caracterizó por temperaturas elevadas a lo largo de los tres meses, pero de forma destacada en octubre, que, de hecho, fue extremadamente cálido, mientras que tanto septiembre como octubre fueron muy cálidos.
Así, la temperatura media, obtenida a partir de los datos registrados en once estaciones meteorológicas representativas, fue de 16,4 grados, con una anomalía de 1,9 grados. Más al por menor, la temperatura mínima tuvo una desviación respeto al valor climatológico de 2,4 grados y, en el caso de la temperatura máxima, la anomalía media fue de 1,4 grados
Los valores más altos, comprendidos entre 17,4 y 17,8 grados, se registraron en el Miño de Ourense y de Pontevedra, en las Rías Baixas y a las afueras del Golfo Ártabro. Por el contrario, las temperaturas más bajas, en torno a los 10 grados, se registraron en las Serras do Eixe y de Queixa, macizo de Manzaneda y en Pena Trevinca.
En lo que respecta a las precipitaciones, fue un otoño extremadamente húmedo después de registrarse, en las dieciséis estaciones que componen la serie regional, una media acumulada de 797 l/m2, lo que representa un 93% más del establecido en el período de referencia.
Esto se debió principalmente a las lluvias generalizadas y persistentes de los meses de octubre -el segundo más húmedo de toda la serie histórica, después del de 1987- y noviembre, en los que las precipitaciones estuvieron muy por encima de los valores climáticos esperados. En esa línea, hace falta indicar que el mes de septiembre se caracterizó por ser húmedo y los dos restantes fueron muy húmedos.
Las sierras litorales y septentrionales y las zonas montañosas de Lugo y Ourense registraron los valores más altos de precipitaciones, entre 1350 y 1600 l/m2, mientras que los más bajos, entre 350 y 500 l/m2, corresponden al litoral de la Mariña y a los valles de los ríos Casaio y Támega.