Los problemas que acarrea la fosa séptica de Arcos y su posible solución llevarán a una complicada tramitación. Así lo ha expuesto el alcalde de Vilamartín, Enrique Álvarez Barreiro tras la solicitud de la asociación de vecinos de encontrar una solución definitiva. “El concello ya había detectado este problema. La fosa está ubicada al lado del antiguo campo de futbol, en una zona inundable. Hace ocho años se llevó también el colector general de Córgomo, Baxeles, As Gralleiras, Valdegodos, un hotel, dos empresas de piedra y tres bodegas, para los cuales no reúne las características”, ha destacado el alcalde.
El primer edil señaló que la solución que han visto los técnicos es arreglar la actual fosa séptica para los vecinos de Arcos e instalar otra depuradora para el resto. Un proyecto que todavía no cuenta con memoria pero que, según antiguos presupuestos, podría llegar a los 200.000 euros. “Haremos una valoración esta semana pero el concello no puede asumir dicho dispendio”, ha destacado el regidor quien anunció ya que acudirán a Aguas de Galicia para saber si se puede solucionar el problema.
Además, animo a los vecinos a que también ellos hagan presión en entes supramunicipales con el fin de conseguir dichas mejoras.
