La Marco Petín ya ha comenzado su cuenta atrás. Las calles históricas del casco viejo de Petín volverán a convertirse en un particular museo del 23 al 25 de agosto. Un total de seis artistas expondrán sus obras. Uno de ellos será Noé Blanco, que por primera vez participará en esta iniciativa, según él mismo refleja, se siente «muy orgulloso de que hayan contado conmigo».
Será una muestra diversa con trabajos de diferentes épocas del autor. De hecho, Noé la define como «ese goteo» que realiza. El artista compagina su hobby con su profesión de bombero forestal, «no dedico todo mi tiempo al arte».
En esta exposición se podrá ver una primera parte de pinturas representativas. Otra será centrada en sus collages, «trabajos con basura». Para finalizar se centrará en su última etapa, en la que está en este momento, «rescato láminas o pinturas y actúo sobre ellas».
Aunque, a mayores de la pintura, está «muy centrado» en la fotografía, pero no sigue perdiendo su pasión por las otras disciplinas.
En sus obras se podrá observar «el equilibrio entre lo racional y lo irracional». Estarán compuestas por trazos nerviosos contrarrestados con «planos de color o estructuras geométricas».
Noé pide a aquellas personas que acudan a la Marco Petín «disfrutar». Asimismo, asegura que para observar sus creaciones «no hace falta saber nada, hay que acercarse con ganas de recibirlo».
