Se han llevado a cabo análisis y estudios de las posibles infracciones que Adif haya podido llevar a cabo y no se descarta interponer un expediente sancionador
La retirada por parte de Adif — Administrador de Infraestructuras Ferroviarias— del convoy que descarriló en Sobradelo terminaba el pasado domingo, 2 de agosto, con un vagón en el margen derecho de la orilla del río Sil. Esta labor que no había sido aprobada por la Confederación Hidrográfica Miño-Sil y ahora está llevando a cabo diligencias de investigación.
Según informan desde el organismo, Adif no solicitó la aprobación para llevar a cabo tal operación. «El pasado domingo nos comunicaron la posibilidad de hacerlo a través del 112, no directamente», explica Alberto de Anta, Comisario Adjunto de Aguas. Desde la Confederación se les indicó que no se contemplaba tal opción «salvo que fuera totalmente imposible trabajar de otra forma y, en todo caso, había que adaptar las medidas de seguridad y ambientales necesarias».
Aun así Adif llevó a cabo la retirada durante la tarde del domingo que terminó con un vagón en el río Sil. En ese mismo momento un técnico de la Confederación se trasladó a la zona para verificar la situación «y se tomaron muestras para ver la posible degradación de las aguas».
Ahora, se está esperando por los resultados del análisis y realizando estudios de las posibles infracciones que el Administrador haya podido llevar a cabo. «Hay enturbiamiento del cauce por la entrada del vagón aunque no tenía mercancía y se descarta otro tipo de contaminantes, pero se han tomado muestras de otras sustancias que puedan aparecer». Lo que sí se ha visto afectada es la vegetación de ribera de la zona.
En el caso de que los resultados de la investigación reflejen que Adif ha cometido una infracción, «habrá que imponer el expediente sancionador».
Por su parte el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias ha informado de que se prevé que el servicio vuelva a la normalidad este miércoles, 5 de agosto, a partir de las 10.00 horas.
El PSdeG solicita retirar el vagón
El PSdeG ha enviado un comunicado en el que asegura haber solicitado a ADIF la retirada del vagón y la restitución de los daños medioambientales causados. Además, reclaman que se evalúe la situación de los otros vagones que permanecen en la orilla de la vía del tren y que se retiren tomando todas las medidas de seguridad ambiental precisas. «Es incomprensible que la recuperación de los vagones no se lleve a cabo siguiendo procedimientos que no impliquen daños para lo medio y para la seguridad ferroviaria», explican.
“Quen contamina, paga”
La entidad ecologista gallega Amigos da Terra ha enviado un comunicado en el que solicitan a la Confederación Hidrográfica y a la Consellería de Medio Ambiente que aplique «á empresa responsable do vertido o principio de Quen contamina, paga regulado na lei de responsabilidade medio ambiental».
Según explican, las sanciones contempladas en la Lei de Augas y en la Lei de responsabilidade ambiental podríann acarrear sanciones de hasta 2.000.000 de euros. «Amigos da Terra considera inaceptable que existindo a lexislación actual, a administración continúe sendo feble coas empresas contaminantes e non vele polo interese xeral da poboación».
Si desea escuchar la entrevista completa a Alberto de Anta, pinche en el siguiente enlace: