miércoles. 17.04.2024

Una multitud de personas, no solo de Vilamartín sino de toda la comarca de Valdeorras, se reunían ayer frente a la iglesia de dicha localidad para recordar y homenajear a los 12 niños fallecidos en el accidente de autobús que tuvo lugar el 19 de abril del año 1977. Un suceso en el que también el chofer del vehículo perdió la vida.

Monolito con el nombre de todos los fallecidos a las puertas de la iglesia recuerda el trágico suceso

 

Los jóvenes, de entre seis y catorce años, viajaban camino al colegio en A Rúa, cuando el vehículo cayó por un terraplén. Un suceso que conmocionó todo el valle y del que ni familiares, ni amigos, ni los valdeorreses en general se han querido olvidar. En la tarde de ayer, cuando se cumplían 40 años de este fatídico día, los familiares quisieron rendir un homenaje a todos aquellos que dejaron de jugar y disfrutar por las rúas valdeorresas.

Un monolito con el nombre de todos los fallecidos fue descubierto a las puertas de la iglesia. Una construcción que para siempre recordará este fatídico hecho. Gelines Trincado, directora del CEIP Xosé Manuel Folla Respino y hermana de uno de los fallecidos, fue la encargada de representar a los familiares. Trincado rememoró el valle de lágrimas en el que se convirtió Valdeorras, sobre todo entre los vecinos de Vilamartín y San Miguel "privándonos para sempre de doce sorrisos infantís".

La directora recordó que esta fue la fecha más triste del municipio, fecha en la que se congeló parte de su vida para siempre. "Pasando de vivir con nós a vivir en nós", destacó y añadió que estos niños eran el alma y el futuro del concello y que su pronto fallecimiento dejó un vacío generacional. La directora aseguró que nadie debe olvidar este suceso ni a estas personas y que la tierra siempre les seguirá recordando.

Vilamartín recuerda a los fallecidos en el accidente de autobús de 1977