Esta semana se inicia el proceso de información pública de los planes rectores de uso y gestión de los parques naturales, entre ellos el de A Serra da Enciña da Lastra en Rubiá. Será en el DOG donde se publiquen los anuncios a través de los que se iniciará el proceso de información pública para someterlos a participación social con el fin de que los ciudadanos, entidades y administración hagan sus alegaciones a los documentos con el fin de aprobar un texto que consiga la máxima participación y el máximo consenso. Así lo explican desde la Consellería de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio que tomó la decisión de dotar a estos espacios de una herramienta que regule su uso público con su conservación. Se trata de dar las directrices y regular las diferentes actividades que se realizan en ellos concretando medidas de conservación de la biodiversidad, zonificación y gestión del territorio, manteniendo un compromiso con el uso racional a través de acciones locales, regionales y nacionales.
Una de las novedades que se introducen con respecto a las ordenaciones vigentes es el establecimiento de un plan de emergencias con el que se pretende optimizar la utilidad de los recursos técnicos y humanos disponibles en el parque en caso de que pueda producirse una emergencia y con una actuación controlada y rápida puedan minimizarse las consecuencias.
En el plan rector de uso y gestión del Parque Natural da Serra da Enciña da Lastra, con más de 3.000 hectáreas de terreno, se diferencias cuatro zonas, entre las que destacamos una de reserva, que incluye zonas con un alto grado de protección en el que no se permitirá el acceso a visitantes ni la realización de actividades deportivas, y donde sólo se permitirán usos directamente vinculados con la gestión, investigación y seguimiento y recuperación de los componentes del patrimonio natural.
Las otras tres zonas restantes contarán con delimitaciones atendiendo a las necesidades de protección de áreas más frágiles o que requieren restricciones específicas, y habrá además una última zona de uso general, con un valor medio bajo de conservación y con una naturalidad reducida, que comprende la zona de la cantera da Pereda, la central eléctrica de Cornatel, la presa de Penarrubia y los viales asfaltados, así como las grandes áreas destinadas a uso público.
