Una vez más el aumento del coste de la basura vuelve a ser protagonista en la comarca. En este nuevo capítulo, la Xunta de Galicia ha concretado la rebaja del canon de Sogama de 2025 para que sea de 83 euros la tonelada.
De este modo, los 295 municipios a los que actualmente presta servicio a empresa pública tendrán la posibilidad de rebajar de 108 a 83 euros/tonelada el coste real a pagar por el tratamiento de sus residuos urbanos, siempre y cuando acrediten con resultados verificables su compromiso con la gestión eficiente y sostenible de la basura.
En este sentido, la Xunta mantendrá durante lo próximo ejercicio a aportación de 12 euros por tonelada que habilitó ya en los presupuestos de 2024 a través de un Fondo de cooperación local adicional, concebido para ayudar a los 313 ayuntamientos de Galicia con la factura de la basura.
Con este nuevo anuncio, el alcalde de O Barco, Alfredo García, recuerda que antes este recibo era de 55 euros. A pesar de esto, «nosotros vamos a respetar ese precio» y, en el momento que se modifique la tasa, «también haremos lo mismo».
El primer edil asegura que en todos los momentos que se hizo una rebaja en el importe al Concello «la repercutimos». Ahora que se va a realizar una subida «haremos lo propio».
Con motivo de este anuncio, García echa la vista hacia atrás, momento en el que desde el equipo de gobierno realizaron una prueba pública para saber cómo reciclaban los vecinos de la comarca y «prácticamente el 40% de lo que había allí no debería estar».
A mayores, la conselleira anunció que todos los ayuntamientos a los que da servicio Sogama tendrán la opción de acogerse la una tarifa reducida del canon siempre que acrediten el cumplimiento de, por lo menos, uno de los siguientes requisitos: reducir en un 1% —como mínimo— la cantidad de residuos entregada en la planta de Cerceda en comparación con la del año anterior; o acreditar un incremento del 3% de la recogida selectiva realizada a través del contenedor amarillo (reservado a los envases de plástico, latas y briks) o bien del contenedor marrón (en el que se deposita la fracción orgánica).