
Las obras de mejora en carreteras y caminos rurales son una de las prioridades del concello de O Bolo. A través del Plan CooperOu de la Diputación y el Plan de Infraestructuras de AGADER, se están ejecutando la reparación de la carretera entre Valdanta y Chao do Castro, el arreglo de calles y accesos en Celeirós, así como la mejora de caminos en Tuxe y Buxán. Además, se están acondicionando los accesos a explotaciones ganaderas en Celeirós y Chao do Castro. «Son actuaciones necesarias para mejorar la conectividad y facilitar el día a día de los vecinos», señala su alcalde, Alberto Vázquez.
Pero además de estas obras necesarias para el bienestar de los vecinos, O Bolo acogerá un año más, y ya van tres, el campeonato de orientación, una disciplina que combina la resistencia física con la capacidad de lectura de mapas. Será los días 22 y 23 de marzo, con pruebas a pie el primer día y en bicicleta de montaña el segundo. «Es la tercera edición de esta competición que organizamos junto al club Our-O. La zona del castillo de O Bolo es un lugar ideal para esta práctica y permite a los participantes disfrutar del entorno mientras ponen a prueba su habilidad para orientarse», explica el alcalde.
O Bolo ultima, además el programa para uno de los eventos gastronómicos más esperados, la Festa da Vitela. Se celebrará el 19 de abril y volverá a rendir homenaje a la ternera de la zona con un menú basado en vitela cocida con patatas y chorizo, productos de gran calidad en la comarca.
Como en la edición anterior, habrá puestos de venta de productos locales y una fiesta posterior. Un día después, el 20 de abril, coincidiendo con el Domingo de Resurrección, tendrá lugar la tradicional Estoupa do Xudas en el Santuario das Ermidas, una celebración recuperada el año pasado tras haber caído en el olvido. Además, durante la Semana Santa se mantendrán el Vía Crucis y la peregrinación al santuario, así como los actos religiosos que se desarrollan desde el Jueves Santo hasta el Domingo de Resurrección.
En el marco de la Festa da Vitela, el Concello rendirá homenaje a Sebastián Ricoy Otero, un médico nacido en As Ermidas que dedicó su vida a la atención sanitaria en el medio rural. «Fue un médico de los de antes, de los que recorrían los pueblos a caballo para atender a los vecinos. Es justo reconocer su labor», destaca Vázquez.
O Bolo afronta la recta final del invierno y el principio de la primavera, con una agenda marcada por la mejora de infraestructuras, el impulso a eventos deportivos y la recuperación de sus tradiciones, consolidando su apuesta por el patrimonio y el bienestar de sus habitantes.