Esta iniciativa, que lleva por nombre "hora sin ruido", comenzaba el año pasado en las Fiestas del Cristo. Su principal objetivo es favorecer el disfrute de aquellos niños —o no tan niños— que por algún motivo no pueden disfrutar de estas celebraciones a causa del ruido.
De esta manera, lo que se pretende es ayudar con la inclusión de aquellas personas que tienen autismo o una alta sensibilidad a los sonidos fuertes y estridentes.
A mayores, también se benefician las mascotas que en muchas ocasiones sufren durante este tipo de celebraciones con las bombas de artificio o simplemente con los sonidos emitidos desde el propio recinto ferial.
Por lo tanto, no habrá música, ni tampoco ruidos o pitidos, cada día de 19:00 a 20:00 horas.