Este sábado 24 de mayo, el aire se llenó del alegre sonido de las bolas de petanca rodando y de la camaradería de los participantes, mientras se celebraba el IV Torneo de Petanca de las Fiestas de Santa Rita, organizado con gran entusiasmo por el Club de Petanca de Valdeorras. Este evento fue especialmente significativo, ya que fue el primero con Marisa Fernández al frente de la presidencia del club, marcando así un nuevo y prometedor capítulo en la historia de esta querida tradición.
Desde bien temprano, las pistas del club se llenaron de energía y concentración, y en ellas se jugaron las rondas previas con la participación de 24 tripletas llegadas desde lugares como San Pedro de Trones, A Rúa, A Coruña, Villafranca, Vigo, Negreira y, por supuesto, el Club de O Barco. La organización fue un éxito rotundo, con 8 pistas en uso y 4 más habilitadas para poder acoger a todos los equipos, aunque más de siete clubes tuvieron que quedarse fuera por falta de espacio, demostrando que la petanca en O Barco está más viva que nunca.
La jornada comenzó por la mañana, con mucha ilusión, y tras las rondas y una deliciosa comida compartida entre todos, llegaron las semifinales y las finales. La emoción se palpaba en el ambiente, y los espectadores disfrutaron viendo cómo los equipos luchaban con entusiasmo por los premios. La tripleta ganadora fue la de Negreira A, formada por Xoán, Carlota y Susana, quienes se llevaron el primer premio en una final muy reñida. El segundo puesto fue para la tripleta de Villafranca, integrada por Cristóbal, Toño y Juanjo, y el tercer premio fue para la tripleta de Negreira B, con Celso, Pedro, José Ramón y Francisco. Además, hubo un premio de consolación para la tripleta de A Coruña C, formada por Tamires, Neiva y Octavio, que también demostraron su buen juego y espíritu deportivo.
La entrega de premios contó con la presencia del concejal de Deportes del Barco, Aurentino Alonso, quien entregó los galardones y compartió unas palabras de felicitación a todos los participantes. Como recuerdo de esta jornada especial, todos los equipos recibieron un pequeño obsequio, un detalle que simboliza la amistad y el deporte que unen a todos los presentes.
Sin duda, un día para recordar, lleno de buen juego, compañerismo y alegría. La petanca en O Barco sigue consolidándose como un deporte que une a toda la comarca y que, con eventos como este, demuestra que la pasión por jugar nunca pasa de moda.
