Carlos Terán, responsable de Agricentro Terán y Garden Sil, vuelve a demostrar que saber de lo que se habla marca la diferencia. Y no solo por el éxito del concurso canino de este sábado —que ya suma más de 100 inscritos—, sino por los consejos que semana a semana comparte con quienes tienen una finca, una piscina o simplemente quieren mantener sus plantas en buen estado.
En su última intervención en Onda Cero Valdeorras, Terán abordó uno de los temas más esperados con la llegada del calor: el mantenimiento de las piscinas. Y lo hizo, como es habitual en él, de forma directa, didáctica y con ejemplos prácticos.
«Cada vez la gente prepara la piscina antes. Ya en abril empezaron a pedir productos, aunque aún no teníamos sitio en las estanterías», comentaba entre risas. Según explica, adelantarse al calor no solo es una cuestión de comodidad, sino también de ahorro. «Antiguamente se vaciaba la piscina en septiembre y se volvía a llenar en abril. Eso hoy es inviable: miles de litros de agua al tuntún. Con un buen invernador y una lona, podemos conservar el agua limpia y cristalina para el verano siguiente».
Y si se llega tarde, también hay solución. Eso sí, siguiendo unos pasos básicos: controlar el pH, ajustar el cloro y aplicar algicida y floculante si aparecen algas. «Sin un pH correcto, el resto de productos no funciona. Es como echar dinero al agua», advierte. Para mantener los niveles estables, recomienda usar pastillas multifunción y tener la depuradora encendida durante el día y las horas de baño. «Cuando nos bañamos soltamos bacterias, cremas solares… todo eso se filtra si la depuradora está funcionando», explica.
Además, ofrece una pauta clara: entre 6 y 8 horas de depuración diarias durante el verano, aumentando el tiempo a finales de agosto y en septiembre, cuando bajan las temperaturas y el riesgo de algas es mayor. «El agua parada es el mayor enemigo: hace efecto charca», resume.
Más allá de los datos técnicos, Terán insiste en lo esencial: «Una piscina bien cuidada es salud. Y al final, de lo que se trata es de disfrutarla esos dos meses y medio que dura el verano».