Andi Canosa acaba de ganar el título MFC — Mamba Fight Club — de MMA —Mixed Martial arts que traducido viene siendo, artes marciales mixtas— tras vencer por en el primer asalto a su rival el pasado sábado en el Complejo Hostelero Paladium.
Sentado en una de las mesas, en el local que posee Ebo, en el Paseo do Malecón, cuenta como se llega a ser campeón mientras se «zampa» unos huevos fritos, con patatas y jamón con sus amigos,
Ganó el primer cinturón profesional en 67 kilos. Y, además de entrenar duro también tuvo y tiene que alimentarse adecuadamente, ya que para competir en este peso fue preciso bajar, casi 10 kilos su peso habitual.
Sigue «una alimentación pautada» un mes o mes y medio antes de la competición, eso sí, supervisada por la nutricionista Emma de «Come con Cabeza». Durante este periodo logró perder ocho kilos y la noche anterior a la competición se pone en el peso que le permite competir, los 67.
La vuelta a su peso «normal» es gradual e integrando alimentos como la verdura que la semana anterior a la competición la tiene prohibida, «se queda agarrada al intestino». En cuanto a carbohidratos, proteínas y grasas también se van añadiendo a las comidas paulatinamente.
Entre bocado y bocado explica: «El día de la pelea pesaba 67 kilos y 28 horas más tarde pesaba 74,5», cuenta el reciente campeón. Seguro que cuando salga de El manjar algún que otro kilillo habrá ganado pues la comida que se sirve en este lugar está «bien rica» y los comensales les sacan brillo a los platos.
Campeón en el primer asalto
Andi Canosa noqueó al catalán Diego Infante en el primer asalto y se proclamaba campeón de MFC en la categoría de 67 kilos. Lo hacía en jaula en el Complejo Hostelero Paladium el pasado sábado 24 de febrero.
La velada estuvo organizada por el Club Mamba K1 de Ponferrada, como asegura Andi. Contó además con la colaboración de Club Kickboxing Valdeorras. Además de MMA también hubo competición y demostraciones de Kick boxing, muay thai y K1, tanto en amateur, neo profesional y profesional.
