
Año tras año A Rúa es recordada como ciudad hermana de Almendralejo en su fiesta de las Candelas. Esta tarde en la plaza del Concello de A Rúa se quemarán las pantarujas extremeñas para reafirmar, aun más si cabe, estos lazos.
A Rúa celebra este 1 de febrero la festividad de Las Candelas después de recibir, de la mano de Josefina Barragán, representante de la expedición almendralejense, dos pantarujas como símbolo del hermanamiento con Almendralejo. La entrega de estas figuras tuvo lugar durante la recepción de la Fiesta del Codillo, un gesto que buscó fortalecer los vínculos entre ambas comunidades.
Ambas figurabas están realizadas por alumnos y padres del colegio C.E.I.P Antonio Machado Almendralejo. En palabras Barragán durante la recepción el pasado 25 de enero: «Os invitamos a que las queméis a las 20:00 para tener un lazo más fuerte».

Originaria de Almendralejo, la festividad de Las Candelas podría remontarse a la fundación romana de la villa, pero los primeros registros documentales situaron esta tradición en el siglo XVII. El ritual central de la fiesta consistió en quemar objetos viejos o impuros para alejar los malos espíritus y comenzar el año con fuerzas renovadas. La celebración perdió fuerza con el paso del tiempo, pero fue recuperada en 1970 y, gracias a su crecimiento en popularidad, fue reconocida como Fiesta de Interés Turístico Regional en 1991.
Uno de los elementos más icónicos de esta festividad son las pantarujas, figuras elaboradas con tela, cartón o papel que simbolizaron las malas energías. Antiguamente, eran vistas como brujas o fantasmas que vagaban por las calles oscuras, pero con el tiempo su representación evolucionó, incluyendo desde la imagen clásica de la bruja hasta personajes de terror modernos.
A Rúa, siempre presente en Las Candelas
Como cada año, la festividad de Las Candelas en Almendralejo rinde un especial homenaje a su municipio hermano de A Rúa, reforzando una unión que ya suma más de dos décadas de historia. La conexión entre ambas localidades se hace cada año palpable con el encendido de la hoguera municipal, un acto simbólico que en años anteriores el periodista Juan Francisco Sánchez Argüello, hijo adoptivo de A Rúa y firme defensor del hermanamiento, la ha tenido presente.
El repique de las campanas de la Torre de los Almendros marca el inicio de la celebración en la Parroquia de la Purificación, un escenario que acoge, año tras año, momentos de profunda emotividad. En ediciones anteriores, Sánchez Argüello encendió la hoguera en nombre del Concello de A Rúa, rememorando así la hermandad que ha quedado patente en múltiples ocasiones. Desde su papel clave en la unión entre ambos municipios hasta la elección de A Rúa como sede de concentración del Extremadura CF, su labor ha consolidado un cariño recíproco entre ambas tierras.
Almendralejo y A Rúa continúan escribiendo juntas esta historia de fraternidad, demostrando que la distancia no es un obstáculo cuando el lazo que une a dos pueblos es tan fuerte, este año celebrando la fiesta almendrejense en A Rúa