La XIII edición de Córgomo Arte llega este año con un tono distinto: más íntimo, más reflexivo y profundamente marcado por los incendios que arrasaron Galicia este verano y que dejaron una huella visible en Vilamartín de Valdeorras. El colectivo artístico, que cada año convierte su espacio en punto de encuentro cultural, ha explicado por qué han tardado en anunciar la nueva edición.
«Poida que no arranque desta nova edición nos notárades máis ausentes, pero co ocorrido este ano tralos incendios decidimos tomarnos un tempo de reflexión e pausa, para pensar de que maneira podíamos achegar o noso gran como semente dun novo comezo», señalan desde la organización.
En su comunicado, el equipo recuerda que el fuego llegó hasta las puertas de la casa donde cada edición cobra vida. «Vilamartín de Valdeorras fíxose cinza e o lume chegou ó limiar da nosa casa», explican, denunciando una sensación compartida en la comarca: «Este verán Galiza ardeu e deixárona arder».
La organización subraya que el daño no fue solo ambiental, sino también emocional y cultural. «A familia que formamos o equipo de Córgomo arte non podemos nin queremos permanecer alleos a esta agresión salvaxe, non só contra o noso medio, senón tamén contra a nosa forma de estar no mundo. Ardeu a terra e ardemos nós.»
Volver al origen: solo Conde y Torino
Bajo el título «Córgomo Arte XIII: Gromos», la edición de este año regresa a su semilla original: las obras de Manolo Conde y Victorino Torino, los dos creadores que dieron vida al proyecto.
«Tralo acontecido cos lumes, cremos que nesta edición é o momento de volver a ela, á orixe. Queremos renacer como sabemos que o fará esta natureza abrasada pola acción humana», expresan, apuntando a las causas humanas del desastre ambiental: «É o cambio climático, é a explotación sen medida do medio ambiente, é a avaricia e a falta de conciencia de querer cada vez máis a costa de todo.»
Recuerdan también un concepto clavado en la identidad del proyecto desde hace años: sus esculturas como piezas «telúricas e primitivas, corpos que agromaban da terra como semente orixinal».
El colectivo pone en valor su trayectoria y su compromiso con el territorio: «Nove anos despois aínda nos mantemos na loita, desde as marxes, desde o rural baleirado e esquecido, pero coa mesma rebeldía e capacidade de reinventarnos.»
La madera de las esculturas «volverá a fincar as súas raíces nos montes que as viron nacer, con máis forza e xenreira de vivir». Los gromos, símbolo de rebrote y vida nueva, articulan esta edición marcada por la necesidad de renacer.
«Córgomo Arte XIII: Gromos» abrirá sus puertas el sábado 6 de diciembre a las 17:00 horas y podrá visitarse hasta el 6 de enero. La exposición permanecerá abierta fines de semana y festivos, en horario ininterrumpido de 10:00 a 22:00 horas.
Como gesto de respeto hacia las personas afectadas por los incendios, este año no habrá acto inaugural, aunque el equipo asegura que recibirá «con gusto a todo aquel que se queira achegar a visitarnos».
