La romería de A Ermida, que se celebra en el mes de septiembre y en la que participan unos curiosos personajes, el Meco y las Pampórnigas, será la protagonista del nuevo gran mural que esta misma semana ha comenzado a pintar el artista Yoseba MP en una pared de grandes dimensiones en el centro de Quiroga y visible, sobre todo, desde el parque de la iglesia.
La asociación Quiroga en Marcha es la promotora de este proyecto, cuyo coste asciende a los 4.400 euros y que ha sido financiado gracias a la colaboración de vecinos. «En este caso, el mural es posible gracias a los propietarios del edificio, a los patrocinadores y las aportaciones privadas a través de la campaña de recaudación de fondos que pusimos en marcha», señala Pablo Núñez, presidente del colectivo. El Concello colabora aportando una grúa.
El vino, el aceite, la miel o el Camino de Invierno son los temas de algunas de las pinturas urbanas ya existentes en Quiroga. Ahora, este nuevo mural homenajeará a unas fiestas y a una parroquia: A Ermida, a escasos dos kilómetros de la capitalidad municipal. Pablo Núñez considera que «además de una celebración religiosa, es una fiesta y toda la comarca la aprecia mucho, tanto por la devoción religiosa, como por lo que se genera en torno al Meco y las Pampórnigas y las actividades en el campo de la fiesta».
El Meco y las Pampórnigas son los curiosos personajes que acompañan a la Virgen de los Remedios en las procesiones de los días 8 y 9 de septiembre. Después, durante la misa, el Meco, vestido de rojo, se queda en el atrio y los allí presentas comienzan a lanzarle monedas que él trata de recoger ayudándose de la escoba con tojos que porta.
Serán los protagonistas de este mural que ya ha comenzado a elaborar el artista Joseba Muruzabal, más conocido como Yoseba MP. «Domina todo tipo de temáticas y, antes de pintar, realiza una composición en la que muestra su idea para el mural, una recreación que acaba plasmando perfectamente en la obra», explica Pablo Núñez, que cuenta que Yoseba MP se desplazó a A Ermida el Domingo de Ramos para conocer a fondo este tradicional festejo.
Muruzabal es conocido como ‘el pintor de las Superabuelas’, una serie de murales que ya le llevó a Quiroga hace dos años, cuando pintó ‘Erundina, vendimadora sobre rodas’, una obra dedicada a una vecina de la localidad.
Un museo que no para de crecer
Con esta obra, Quiroga en Marcha pretende continuar adelante con su museo de arte urbano al aire libre. Desde la asociación aseguran que «cuando empezamos con este proyecto, la idea era convertir lugares que no dicen nada en espacios artísticos. Humildemente, creemos que se está consiguiendo y eso es por la implicación de la gente».
Las obras, que se reparten por todo el casco urbano de Quiroga, gustan a vecinos y visitantes. «Eso se ve bien en redes sociales, pues algunos de los murales de la localidad están publicados en cuentas de Instagram que tienen hasta medio millón de seguidores», destaca Pablo Núñez. El objetivo es «contar con una ruta de arte urbano que obligue a quien pase por Quiroga a parar».
De cara a los próximos meses, Quiroga en Marcha ya tienen nuevos proyectos en mente, como una actuación con la Escuela de Arte de Salamanca, «un proyecto muy bonito que anunciaremos en breve y creemos que va a gustar, porque servirá para reconocer a algunos quirogueses que lo merecen».
