
Casi 200 alumnos de siete colegios de Valdeorras se dieron cita este lunes en O Bolo para participar en la jornada de convivencia escolar «Yosso e Florencio, descubriendo o arte na paisaxe». La iniciativa, organizada por la Fundación Florencio Delgado Gurriarán con la colaboración de los concellos de O Bolo, A Rúa, Vilamartín y O Barco, buscó acercar a los más pequeños al arte y la literatura de la comarca a través de dos de sus grandes referentes: el pintor Yosso y el poeta Florencio Delgado Gurriarán.
Durante toda la mañana, los niños y niñas de 4º de Primaria del CEIP do Bolo, CEIP Xosé Manuel Folla Respino (Vilamartín), CEIP Manuel Respino (A Rúa), CEIP Otero Pedrayo, CEIP Condesa de Fenosa, CEIP Julio Gurriarán y el Colexio Divina Pastora (O Barco) participaron en distintas actividades repartidas entre el Museo Yosso, el colegio del Bolo y el castillo.

«Foi unha xornada preciosa. Os nenos querían máis tempo, máis actividades… Creo que todos disfrutaron moitísimo», aseguraba al finalizar el encuentro Débora Álvarez Moldes, directora de la Fundación. La iniciativa, explicó, nació del deseo de recuperar la relación con los centros educativos tras varios años centrados en actividades dirigidas al público adulto: «Démonos conta de que tiñamos que volver aos colexios. Se non contamos a historia aos cativos, perdémola».
La convivencia giró en torno a la creatividad y la conexión con la naturaleza. Los grupos experimentaron con materiales orgánicos —como vino, cúrcuma o arándanos— para crear pigmentos naturales, y descubrieron cómo incluso los tizones de los montes quemados pueden convertirse en lápices para dibujar. En el castillo trabajaron con poemas de Florencio y participaron en un juego literario con palabras relacionadas con la naturaleza.

También hubo tiempo para actividades lúdicas, como el tiro con arco o un taller sobre «a árbore do nacemento» según la tradición celta. «Algúns sentíronse cabaleiros medievais, outros mergulláronse na poesía ou nos xeroglíficos agochados polo camiño», contaba Álvarez entre risas. «Pero todos marcharon coa sensación de ter vivido algo diferente».
Un proyecto que aspira a crecer
La directora adelantó que la Fundación quiere dar continuidad a esta experiencia con nuevas ediciones en distintos lugares de Valdeorras: «Gustaríanos converter isto nun proxecto anual que percorra a comarca e siga unindo ao alumnado co seu entorno e cos seus artistas. Ás veces coñecemos máis o que está lonxe e esquecemos o que temos máis preto».

Desde los centros participantes también destacaron la importancia de este tipo de encuentros. José Luis Fernández Casas, director del CEIP do Bolo, subrayó que «hoxe a rapazada síntese protagonista e parte activa da comarca, ademais de ter a oportunidade de valorar artistas que creceron onda eles». Por su parte, Modesto Rodríguez, del CEIP Condesa de Fenosa, recordó que «ás veces o que menos coñecemos é o máis próximo e convivencias coma esta fannos conectar».

La Fundación agradeció la colaboración de los concellos implicados, de la empresa Ocio e Deportes, y de las educadoras Mayte Núñez e Inés Cao, responsables de la parte creativa y pedagógica de las actividades. «A arte e a cultura local son unha ferramenta poderosa para educar en valores e fortalecer a identidade», concluyó Álvarez. «Se o facemos xuntos —docentes, familias e fundación— poderemos seguir deseñando cousas realmente interesantes para Valdeorras».