
Poca repercusión del impuesto de plusvalías en Valdeorras
Aunque a nivel nacional se asegura que el Real Decreto afecta a los ingresos de los ayuntamientos, no ocurre así en el caso de la comarca

Aunque a nivel nacional se asegura que el Real Decreto afecta a los ingresos de los ayuntamientos, no ocurre así en el caso de la comarca
La alarma estallaba el pasado 26 de octubre. El Tribunal Constitucional, TC, declaró nulo el método que se utiliza para calcular el conocido popularmente como impuesto de plusvalías que quedaba en suspenso.
En dicha sentencia, el TC estableció que dicha tasa —que aplican los ayuntamientos cuando se vende, hereda o dona un inmueble o terreno—calcula con un sistema objetivo y obligatorio ajeno a la realidad del mercado inmobiliario y a la capacidad económica demostrada por el contribuyente.
Así, los ayuntamientos pedían al gobierno una nueva regularización para poder seguir ingresando en este concepto, destacando muchos gobiernos municipales que del mismo dependían buena parte de sus ingresos. En el caso de Valdeorras, como otros muchos, este hecho no se produce.
El concello que se puede ver más afectado es el de O Barco, aunque no en gran medida puesto que el ingreso de esta tasa supone una parte mínima de su presupuesto. “El año pasado, de un presupuesto de más de nueve millones, las plusvalías eran 80.000 euros. Evidentemente es un dinero que no queremos perder, pero no supone un gran porcentaje para el concello”, ha explicado su alcalde Alfredo García quien destacó que el cambio afectará a ayuntamientos de ciudades grandes, pero no a O Barco. De hecho, cabe recordar que el concello de Ourense alertó de que dejarían de ingresar más de siete millones de euros anuales, y la Fegamp advirtió que esta fuente de ingresos supuso, en 2019, 47.788.000 euros para las arcas locales gallegas.
Volviendo a Valdeorras, en el caso de Vilamartín no les afecta debido a un error que tratan de subsanar. “El registro de la propiedad no nos pasa los datos para aplicar el impuesto por lo que no ingresamos nada en ese concepto. Pero es algo que tratamos de solucionar”, detalló su alcalde Enrique Alvarez Barreiro aunque saben que no supone una cifra fundamental para las arcas municipales.
En esta misma línea se pronuncian el resto de concellos de la comarca, ya que algunos como A Rúa o Manzaneda no cobran nada por este concepto. En igual situación está San Xoán de Río donde tampoco existe esta tasa.
Ahora, el Consejo de Ministros con el fin de adecuar el impuesto a esta sentencia ha aprobado un Real Decreto. Dicha reforma establece con claridad que las operaciones donde no haya un aumento de valor no estarán sujetas a tributación y que se deberá constatar a instancias del contribuyente que no se ha obtenido ganancia alguna.
En caso de ganancia, el método de cálculo será optativo, con lo que el contribuyente podrá elegir entre pagar conforme al nuevo sistema objetivo, que se adaptará a la evolución del mercado inmobiliario, o en función de la plusvalía real.
De esta forma, el contribuyente podrá reclamar que se le aplique la plusvalía real si la diferencia entre el valor de trasmisión y el de adquisición es inferior al resultante de la estimación objetiva.