La villa de Manzaneda se ubica en la comarca de Terra de Trives y su historia está ligada a la época medieval. Los orígenes de esta villa habría que buscarlos en un antiguo poblado prerromano que se situaba en donde hoy se emplaza la fortaleza. Enclavada entre las aguas del río Bibei y la Sierra de Queixa guarda grandes monumentos como su cárcel.
Uno de sus mayores puntos de interés es Cárcel de los Sarmiento, un edificio que antiguamente formaba parte del Castillo y que hoy día es utilizado como Centro Cultural para la realización de diversas actividades por parte de los vecinos.
Está altamente vinculada con Ribadavia, dado que fueron los condes de dicha localidad quienes lo mandaron construir. Las múltiples restauraciones que ha sufrido impiden tener una fecha de datación exacta, aunque todo parece indicar que se levantó en el siglo XVI. En su pared frontal destaca la Piedra de Armas con los trece roeles de los Sarmiento, unas piezas redondas que es común encontrar en los escudos de armas.
Los restos de este castillo, en la parte alta del casco histórico, hacen hoy de idílico mirador sobre la villa. Hay que hacer un gran esfuerzo para imaginar que sobre ellos se alzó un gran baluarte defensivo, pues sólo quedan algunos vestigios de la barbacana posteriores al s. XV y algunas columnas y capiteles dispersos. Y es que el castillo fue destruido por la revuelta irmandiña en el s. XV, hubo se ser reconstruida, llegando en el XVI a ser una de las fortalezas más importantes de Galicia.
Otras huellas del pasado de Manzaneda son sus murallas, en las que podemos cruzar la Porta da Vila y abandonar el centro histórico en la Porta de Baixo, puerta de salida de la localidad.
