
Una treintena de alcaldes de la Ourense, entre los que se encontraban varios de Valdeorras, se reunieron esta mañana para diseñar una estrategia conjunta con la que forzar al presidente de la Diputación Manuel Baltar a dejar de lado a dedocracia en el reparto de los fondos públicos provinciales. "Y que, la Diputación de Ourense sigue siendo la única de las diputaciones gallegas que carece de un plan único basado en criterios objetivos, con el que distribuir el dinero entre los municipios, independientemente de la afiliación política de los gobiernos locales", aseguran desde el PSOE.
El encuentro, convocado por la Federación Gallega de Municipios y Provincias (Fegamp) y presidido por su presidente y alcalde de O Barco Alfredo García, y por los diputados provinciales Francisco Fraga (PSdeG-PSOE) y Ramiro Rodríguez (BNG), reunió aregidores del BNG, PSdeGPSOE, Ava, Compromiso por Galicia y formaciones independientes.
Los mandatarios locales acordaron una estrategia conjunta que se hará pública en las próximas semanas, expusieron diferentes puntos de vista sobre el plan único que necesita Ourense y criticaron con firmeza "la actitud antidemocrática del PP,que sigue usando la Diputación como una parcela del baltarismo en la que emplean los fondos públicos para pagar favores políticos. Mientras perfecciona la dedocracia, Baltar margina con descaro a los ayuntamientos gobernados por otras formaciones y, por lo tanto, a la mitad de los habitantes de la provincia", señalaron desde el PSOE.
Desde el PSOE destacan que la Diputación ourensana es la única de Galicia que carece de un plan que aglutine las subvenciones a los ayuntamientos, lo que provoca una absoluta discrecionalidade en la asignación de los fondos y un menor porcentaje de inversiones. "No hay mas que comparar las cifras totales repartidos entre los municipios en las cuatro provincias: 74 millones en la Diputación de A Coruña; 41 millones en la Diputación de Pontevedra y 20 millones en la Diputación de Lugo (mas aportaciones municipales), frente los escasos 11,5 millones que suman todos los planes y programas que la Diputación de Ourense reparte, en su mayor parte, la dedómetro.
Según determina la normativa vigente en materia de régimen local, las diputaciones tienen el deber de "aprobar anualmente un plan provincial de cooperación a las obras y servicios de competencia municipal, en cuya elaboración deben participar los ayuntamientos de la provincia. El plan deberá contener una memoria justificativa de sus objetivos y de los criterios de distribución de fondos, criterios que en todo caso han de ser objetivos y equitativos y entre los que están el análisis de los costes efectivos de los servicios de los ayuntamientos y podrá financiarse con medios propios de la Diputación, aportaciones municipales y las subvenciones que acuerden la C.C.La.La. y el Estado con cargo a sus respectivos presupuestos (...)".
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