El centro de acogida de animales cerrará el año con un centenar de perros atendidos, una cifra similar al 2018
La perrera comarcal de Valdeorras recogió 30 perros en los dos últimos meses, una cantidad considerable teniendo en cuenta que cerrará el año con un balance de un centenar de acogidas, una cifra prácticamente similar al año pasado.
La mayor parte de los perros que están acomodados en este centro de acogida de animales, que está ubicado en A Rúa, no son de raza, o lo que es lo mismo, son «mestizos». Y abundan los ejemplares adultos, teniendo en cuenta que son las crías y los más pequeños los que tienen más salida a la hora de la adopción.
Los operarios de la perrera se encargan de retirar los perros de la vía pública, previa solicitud de los ayuntamientos y Policía Local correspondiente. «Son perros abandonados, si bien puede haber alguno que dejaron suelto los propietarios y que pasan a recoger días después», comentan trabajadores de las instalaciones.
Nada más «aterrizar» en la perrera, los animales son desparasitados, vacunados y se les coloca un chip, además de registrar una reconocimiento por parte de un veterinario.
La adopción cuesta cerca de 50 euros, tarifa que incluye una cartilla sanitaria y un microchip de identificación del animal.
Pero los propietarios de animales también tienen la opción de dejar en este centro de acogida a sus perros, caso en el que deben abonar 35 euros.
El centro de recogida de animales domésticos abandonados en la comarca de Valdeorras, ubicado en A Rúa, comenzó a funcionar el 16 de septiembre se 2014. Cumplió recientemente cinco años de actividad.
Da servicio a los municipios de la comarca de Valdeorras y las vecinas de Trives y Viana do Bolo, abarcando una franja amplia que llega hasta Manzaneda San Xoán de Río y Vilariño de Conso.
Texto y fotografías: Susana Prieto
