
La Xunta de Galicia define el Real Decreto de Registro obligatorio de explotaciones avícolas de autoconsumo, puesto en marcha por el gobierno central en el año 2021, como un «exceso de burocracia innecesaria en el rural. No tiene en cuenta la realidad de Galicia».
Todas las comunidades están obligadas a registrar las explotaciones avícolas de autoconsumo hasta el cierre del año 2024. En el caso de Galicia, la normativa se hizo efectiva el 1 de enero de este año. Desde entonces los gallineros deben estar inscritos en el Registro General de Explotaciones Ganaderas (REGA), dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
El conselleiro de Medio Rural en funciones, José González, trasladó en una reunión al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, su «rechazo a esta obligatoriedad impuesta desde el gobierno central. Ya son más de 52.000 los gallineros de autoconsumo registrados en Galicia, pequeñas explotaciones que no se pueden equiparar con las profesionales».
José González destaca en un comunicado que la Xunta «presentó hasta 40 alegaciones a este texto legal a lo largo de su tramitación, insistiendo en que dejara fuera de la aplicación a las explotaciones avícolas de autoconsumo».
Largas colas para registrar gallineros en A Rúa
El concello de A Rúa, a través de su oficina agraria, está teniendo una alta demanda para registrar las gallinas y gallineros tras el Real Decreto de Registro obligatorio de explotaciones avícolas de autoconsumo publicado en el portal de la Xunta de Galicia. Una media de 40 personas al día llega a este servicio para conseguir declarar sus espacios sin tener que hacerlo a través de la sede electrónica.
María Ángeles Alonso es técnica en esta oficina ruesa, e indicaba que «la problemática no llega solo por el registro de los animales, sino que de no cumplir con este decreto, tampoco pueden adquirir pienso». Esto supone un impedimento para la población, ya que gran parte de los ciudadanos no cuentan con las facilidades para manejar el servicio en línea.
En A Rúa ayudan a las personas a registrar sus gallineros como una segunda opción, presencial, sin tener que hacerlo a través de Internet. «Nuestra oficina es casi 100% viñedo pero a raíz de esta normativa estamos notando una afluencia altísima, por lo que estamos destinando dos días por semana para atender a todos». Con todo, están intentando ampliar la atención a tres jornadas semanales.
Los almacenes valoran el efecto del Real Decreto
Los gallineros de autoconsumo deben ser registrados para controlar los posibles brotes de Gripe Aviar. En este sentido, todos aquellos espacios que tengan un máximo de 30 gallinas ponedoras y 50 pollos de engorde deben declarar su gallinero a través de Medio Rural, en un procedimiento gratuito pero electrónico.
Rebeca Álvarez es la dueña de Almacenes Pote y también una de las impulsoras de la asociación ATIGA, que tiene entre sus objetivos defender los derechos de los afectados. Ella explicaba que «lo que falta sobre todo es información, ya que la gente ni siquiera sabe cómo debe registrar el gallinero ni si deberían cumplir ciertas condiciones físicas en sus espacios».

La dueña denuncia también que «personas que antes compraban aquí ahora se van a otros pueblos o ciudades fuera de Galicia, ya que esta medida es únicamente gallega, por temor a que la declaración de los gallineros les perjudique en cualquier sentido». Así, Almacenes Pote perdió «casi un 60% de ventas desde el lanzamiento del Real Decreto» de Registro obligatorio de explotaciones avícolas de autoconsumo.
Si quiere ver la entrevista completa a Rebeca Álvarez, pinche en el siguiente enlace de vídeo: