Este sábado 29 de marzo, si el cielo lo permite, Galicia vivirá un pequeño adelanto de lo que está por venir: un eclipse parcial de Sol visible desde cualquier punto de la comunidad. El mejor lugar para disfrutarlo, sin duda, será el Centro Astronómico Trevinca, en A Veiga, donde el fenómeno coincide con la celebración del festival Al-Majisti. Desde allí, su director, Óscar Blanco, nos invita a mirar al cielo… pero con sentido común.
«Lo único que necesitamos es que esté despejado», comenta con entusiasmo. El eclipse comenzará poco antes de las 11 de la mañana y alcanzará su punto máximo en torno a las 11:30, cuando la Luna oculte aproximadamente un 40 % del disco solar. No será un apagón, pero sí una leve disminución de la luz, como si una nubecilla pasase brevemente por delante del Sol. «Es una bajada muy tenue, no todo el mundo la notará, pero los que estén atentos sí percibirán ese momento», explica Blanco.
Aunque el fenómeno es parcial y la experiencia no será tan llamativa como en otros eclipses, siempre resulta fascinante observar cómo la Luna se interpone entre la Tierra y el Sol. Eso sí, hacerlo sin protección puede ser peligroso. «No vale cualquier cosa. Nada de radiografías, gafas de sol ni inventos caseros. Si no tenemos filtros homologados, hay métodos indirectos muy sencillos y eficaces», advierte. El más fácil: una cartulina con un pequeño agujero que proyecte la luz del Sol sobre una superficie blanca. Así, sin mirar al astro directamente, se podrá ver el característico “mordisco” que deja la Luna.
En A Veiga, el Centro Astronómico ofrecerá una observación guiada con telescopio solar y pantalla, además de proyecciones caseras al alcance de cualquiera. «Hay cierta psicosis con las gafas de eclipse. Esta semana he recibido más de 50 llamadas preguntando dónde conseguirlas. Pero no hace falta tanto: con métodos seguros, se puede disfrutar igual», tranquiliza Blanco.
El gran eclipse que se avecina
Pero si este eclipse genera tanta expectación, es solo porque abre el apetito para el gran fenómeno astronómico que se aproxima: el eclipse total de Sol del 12 de agosto de 2026. Será visible en una amplia franja del norte peninsular y, por primera vez en más de un siglo, Galicia estará dentro de la zona de totalidad.
«El último eclipse total de Sol que cruzó la península fue en 1912, y tocó también la zona de Valdeorras y A Veiga. Desde entonces, nada parecido. Lo del año que viene será histórico», asegura Blanco, que sabe bien de lo que habla: ha viajado por todo el mundo para presenciar eclipses y el de 2026 será el décimo en su lista. Esta vez, sin embargo, lo verá desde casa. «Tengo ilusión por vivirlo desde A Coruña, con mi familia. Pero aquí en A Veiga también será total, aunque por poco. Esté quien esté ese día en el centro, se organizarán actividades. Es una oportunidad única que no deberíamos dejar escapar».
Y es que, a diferencia del de este sábado, el eclipse de 2026 sí oscurecerá por completo el cielo durante unos segundos. «Solo en ese breve instante podremos mirar al Sol sin filtros, porque estará completamente tapado. Pero fuera de esa franja, seguirá siendo parcial y necesitaremos protección en todo momento», aclara el director del centro.
Las previsiones apuntan a que miles de personas se desplazarán para presenciarlo en vivo, tanto desde otros puntos de España como desde el extranjero. «No es psicosis, es emoción. La gente se mueve como si fuera un gran festival. Hay que planificar bien, llegar con tiempo, y tener incluso un plan B por si el tiempo no acompaña. Pero la experiencia lo merece», asegura Blanco.
Hasta entonces, la cita es este sábado en A Veiga, con los pies en la tierra y la mirada —protegida— puesta en el cielo.
