Un informe de la Dirección General de Tráfico (DGT) ha constatado que el radar situado en la N-120 a su paso por la localidad de Arcos (Vilamartín de Valdeorras) está entre los 50 que más multan en todo el territorio nacional.
Este cinemómetro no es la primera vez que se sitúa en este ranking -comandado por el situado en la A-44 en Bailén (Jaén)- y además el pasado año fue el que más dinero recaudó en toda la provincia con una media de 39 infracciones al día. Este año la media ha bajado en 7 infracciones diarias para situarse en 32.
El dispositivo está señalado con bastante antelación, -en torno a 2 kilómetros antes de pasar por delante del radar una señal indica la existencia del mismo- y además 200 metros antes una señal de 80 kilómetros por hora avisa de que se debe bajar la velocidad desde los 100 que están establecidos antes de la señal.
Las multas impuestas por el radar fijo en Valdeorras hasta octubre del pasado año fueron un total de 9.765 con una recaudación estimada de 500.000 euros. El dispositivo provoca la mitad de las multas en toda la provincia en una carretera donde la media de vehículos diarios es de 7.675, sólo equiparable en Galicia con el corredor que une Brión con Noia donde se ha instalado un dispositivo hace unos meses en una carretera que apenas supera los 10.000 vehículos diarios en un formato de carretera que en breves será historia, porque en breves será transformado en autovía.
Este cinemómetro pese a ser visible desde bastante distancia, está situado en un cruce peligroso que da acceso a Arcos y Córgomo desde la N-120 y viceversa. Nada más pasar el dispositivo la velocidad vuelve a bajar para obligar a los conductores a no superar los 60 kilómetros hora.
