viernes. 29.03.2024

David García es natural de Sabuguido, en Vilariño de Conso. Es ingeniero aeronáutico y regresó el pasado mes de diciembre tras seis meses en California donde trabajo en la NASA, lugar al que espera volver

David García es un joven de Sabuguido, en Vilariño de Conso pero ya ha vivido su «experiencia americana». Hasta finales de 2019 trabajó en la NASA, concretamente en su instalaciones de Mountain View en el estado de California; lugar al que la pandemia ha impedido volver, por el momento.

García señala que su periplo comenzó cuando una exalumna de su Universidad buscaba becarios para su proyecto en la NASA, para el cual, finalmente, selecciono a cuatro españoles. «Es muy raro que fuéramos tantos de España». Así comenzó a trabajar en un proyecto de movilidad aérea urbana donde desarrollaba taxis aéreos que, en el futuro y sin impacto ecológico, pretenden evitar congestiones de tráfico pero que también podrían tener otros usos como servicios de paquetería, entre otros.

Aunque David ha realizado también una beca de investigación con el Banco Santander, la NASA contactó con él para volver a sus instalaciones en marzo. «Fue cuando se cerraron las fronteras debido a la crisis sanitaria y me quedé estancando», recuerda aunque en las últimas semanas ha recibido notificaciones de reapertura de fronteras. «Mi jefe está trabajando para que podamos incorporarnos o, si no podemos, que tengamos la posibilidad de trabajar desde España aunque no sería lo óptimo porque no tenemos acceso a los ordenadores de allí», asegura el ourensano.

David con sus padres y una prima en la Casa do Concello

Aunque quiere retomar su trabajo en California, el ingeniero señaló que en su estancia allí, echó de menos a su familia y reconoció que el ritmo de vida era más acelerado. «Donde yo vivía y trabajaba se ubicaban la sedes de las empresas más importantes del mundo. Es un lugar donde conocer a personas jóvenes y de diferentes países y continentes. Hay mucha diversidad y me gusta trabajar con personas de diferentes culturas porque tienen diversos enfoques», advirtió el joven.

Otra de las diferencias latentes fue el trato con sus superiores. «Mi jefe allí es coreano y se preocupa por nosotros. El primer día nos enseñó todas las instalaciones, nos invitó a comer, nos llevó al banco para abrir la cuenta bancaría... Estaba muy preocupado por nosotros pero también tienes que responder con resultados, con trabajo», advierte.

Respecto al futuro de la aeronáutica en España, David reconoce que la parálisis económica derivada de la crisis sanitaria ha supuesto un golpe importante para las compañías aéreas. «Tengo compañeros que estaban haciendo una beca en Airbus y se han ido a la calle y las contrataciones también se han paralizado. De aquí a cinco años es un futuro incierto», indica García quien se muestra optimista puesto que el ingeniero aeronáutico podría trabajar en otras áreas. «El ingeniero aeronáutico está cualificado para trabajar en otros campos: bancos, con la parte de inteligencia artificial, empresas de consultoría, en el sector eólico para el diseño de turbinas…».

Respecto a su futuro personal, David García tiene varios frentes abiertos. Entre otros reconoce que la Agencia Espacial Europea contacto con él a través de la red profesional Linkedin. «Me dijeron que pronto abrirían algunos perfiles que si estaba interesado para hacer una entrevista pero con la pandemia todavía no se han abierto dichos perfiles», advirtió.

Melisa Macía hace entrega de un recuerdo a David García

Aunque David siempre ha destacado por sus altas calificaciones, entre las que se encuentran premios a la excelencia, reconoce que el trabajo es lo más importante para alcanzar este tipo de puestos.  

Trabajo que ha querido reconocerle el concello de Vilariño de Conso con un reconocimiento que la alcaldesa, Melisa Macía en nombre de toda la corporación municipal realizó en la tarde del domingo.

Desde Vilariño de Conso a la NASA