La tormenta descargó en la zona de la N-120 y carretera de Rubiá lo que provocó que el agua convirtiese la Avenida del Bierzo en un arroyo de lodo y agua.

La tormenta descargó en la zona de la N-120 y carretera de Rubiá lo que provocó que el agua convirtiese la Avenida del Bierzo en un arroyo de lodo y agua.