
Replanteamiento de obra de la guardería de O Barco tras la renuncia de la adjudicataria

El Concello de O Barco ha puesto en manos de la segunda empresa en la lista de adjudicación, las obras de reforma de la Escuela Infantil de la villa. Según explica el alcalde, Alfredo García, al extenso proceso administrativo del concurso que «tuvo retrasos porque la mayoría de las empresas presentaron mal la documentación, hubo requerimientos, nuevas mesas de contratación», se unió la renuncia de la empresa adjudicataria «porque el día que terminaba el plazo de presentación de documentos renunció, porque no tenía capacidad para hacer frente a las obras que tenía entre manos, dejando la obra de O Barco, la más pequeña presupuestariamente».
El retraso de varios meses hasta que se puedan comenzar las obras, pone en cuestión la planificación inicial por lo que ahora, con la nueva empresa, «habrá que hacer una reformulación de plazos a partir de la fecha de empiece» porque al intención del Consistorio era aprovechar los meses estivales para la colocación de un ascensor, subvencionado con 21.000 euros, cuya construcción será aplazada hasta el próximo año «aplazando la justificación de esa obra o volviendo a pedir la citada subvención el año que viene, entendiendo que con las mismas condiciones, será concedida de nuevo», explica García. Por eso, la intención ahora es comenzar a remodelar el edificio en su parte externa, realizando obras que no interfieran en el trabajo habitual de la Escuela Infantil.
Apunta el regidor que «si todo marcha como debe, una fecha razonable para que las obras se pusieran en marcha podría ser el 15 de octubre». Considera que una segunda renuncia que provoque tener que adjudicar la obra de nuevo a una tercera empresa «sería el colmo de los colmos».
Aún con el retraso acumulado de comienzo de las obras, «el proyecto seguirá siendo de tres anualidades» porque empezar las obras en octubre en vez de en julio «no va tener mayor incidencia sobre la fecha final de remate de las obras». El presupuesto de esta obra es de 500.000 euros; 150.000 euros provenientes de la Xunta de Galicia, 21.000 de subvención para la construcción de un ascensor, y el resto, del bolsillo del Concello.