El Puente de Pradoalbar, construido sobre el río Cerveira, es una obra de mampostería que destaca por su singularidad y su integración en el entorno. Su estructura, compuesta por un único arco, está realizada con mampuestos de loseta, una roca típica de la zona, lo que refuerza la idea de que fue construido aprovechando los recursos locales. El arco, con su aparejo irregular, refleja una técnica constructiva sencilla pero eficaz, capaz de resistir el paso del tiempo y de las aguas que, bajo el puente, se convierten en el río Conso.
El origen exacto de esta construcción es incierto, pero tanto los vecinos de la zona como algunos estudiosos atribuyen su autoría a los romanos. Su ubicación estratégica, en un paso obligado hacia el Castillo de Cerveira, refuerza esta teoría, ya que era habitual que los romanos construyeran infraestructuras que facilitaran el acceso a puntos clave, como fortalezas y asentamientos importantes. Además, el puente forma parte de una calzada que, por sus características, recuerda a otras vías romanas conocidas.
Un camino que conecta Historia y Naturaleza
El acceso al puente se realiza a través de un camino que parte del pueblo de Pradoalbar y se adentra en la sierra, avanzando hacia el castillo. Aunque el estado del camino es regular, su recorrido ofrece una experiencia única para los amantes de la naturaleza y la historia. Los paisajes que lo rodean, dominados por montañas y vegetación autóctona, acompañan a los visitantes en un viaje que conecta el presente con un pasado lejano.
Un Tesoro por Descubrir
El Puente Romano de Pradoalbar no es solo una infraestructura funcional; es un símbolo del legado histórico que Vilariño de Conso preserva con orgullo. Cada piedra cuenta una historia, y cada curva del río que lo atraviesa recuerda la importancia de las conexiones, no solo físicas, sino también culturales y emocionales, que estos puentes representaban.
En el contexto de nuestra serie de reportajes sobre los puentes de Valdeorras, este puente se suma como un ejemplo más de cómo las infraestructuras históricas pueden convertirse en puntos clave para redescubrir el pasado y disfrutar del presente.
Te invitamos a recorrer el camino hacia Pradoalbar, a cruzar este puente cargado de historia y a imaginar las vidas y los pasos que, durante siglos, lo han convertido en un pilar fundamental para la región. Valdeorras sigue siendo un territorio de descubrimientos, y el Puente de Pradoalbar es, sin duda, uno de sus grandes tesoros.
