La plaza del Concello de O Barco de Valdeorras fue el escenario principal de las actividades organizadas por ASFAVAL (Asociación de Familiares de Personas con Discapacidad de Valdeorras) y Disvalia para conmemorar el Día Internacional de las Personas con Discapacidad. La jornada, que se celebra cada 3 de diciembre, incluyó un mercadillo solidario, exposiciones de trabajos realizados por personas con discapacidad y un manifiesto que pone el foco en la importancia de la accesibilidad y la vivienda digna como derecho fundamental.
Beatriz Vázquez, trabajadora social de ASFAVAL, destacó durante el evento la relevancia de estas iniciativas para visibilizar el trabajo de los usuarios de los centros ocupacionales y de día. «Es importante que la sociedad vea su trabajo y que estas actividades les ayuden a socializar. Aunque hemos avanzado, todavía queda mucho por hacer para que su integración sea una realidad cotidiana, no solo un tema de este día», señaló.
Por su parte, Ana, tesorera de Disvalia, subrayó el avance lento pero constante en la lucha por la igualdad: «Se va progresando, pero aún falta mucho. Este tipo de actividades son importantes para que se nos vea y para seguir superando barreras». Además, Begoña, otra representante de la asociación, destacó el apoyo del Concello de O Barco en temas de accesibilidad: «El alcalde siempre está dispuesto a colaborar, y hemos logrado mejoras en calles, piscinas y otros espacios públicos», además de agradecer las donaciones que reciben cada año para el mercadillo de flores solidario.
Un manifiesto que pone el foco en la vivienda
Durante la jornada, se distribuyó un manifiesto del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), que este año se centró en la vivienda como derecho fundamental para la vida independiente. Según el documento, casi el 70 % de las viviendas en España no cumplen con los estándares de accesibilidad, lo que limita la autonomía de las personas con discapacidad.
El manifiesto hace un llamamiento a las administraciones públicas para garantizar viviendas accesibles, alcanzables e inclusivas. Entre las medidas propuestas, destacan la reforma de la Ley de Propiedad Horizontal para hacer obligatorias las obras de accesibilidad en comunidades de propietarios, la creación de un fondo estatal de promoción de accesibilidad y la implementación de políticas que favorezcan a colectivos especialmente vulnerables, como mujeres y jóvenes con discapacidad.
Las actividades de este 3 de diciembre en O Barco de Valdeorras son un recordatorio de los retos diarios que afrontan las personas con discapacidad y sus familias, pero también de los logros alcanzados gracias a la colaboración comunitaria. En palabras de Beatriz Vázquez, «no se trata solo de eliminar barreras físicas, sino de cambiar mentalidades para construir una sociedad más justa e inclusiva».
