Valdeorras es una caja de sorpresas y a su rico patrimonio cultural y a una larga tradición vinculada a la cultura del vino y la pizarra, ahora suma el salto al mundo de los deportes electrónicos y, en particular, de los e-sports. Algo poco habitual en Galicia, donde todavía se ve a pocos deportistas.
Es el caso de Juan Manuel Serrano Garrido. Natural de O Barco, este entrenador de 31 años ha decidido aprovechar la oportunidad y desde el pasado mes de noviembre entrena a jugadores en el mundial FIFA. Recientemente participó en un campeonato en Londres y consiguió quedar entre los 64 mejores del mundo, con el cordobés David Sánchez.
Además de su vinculación con los e-sports, durante su viaje a Londres coincidió con Javier Romero Alarcón, una de las grandes estrellas de los e-Sports. Curiosamente, su abuela «es de Mormentelos y él ha veraneado muchas veces allí y, en Viana do Bolo».
«Así que podemos decir que Valdeorras y alrededores ha estado representada en la élite de unos de los videojuegos más jugados mundialmente»; comenta este «veterano» entrenador de e-sports de 31 años y juez de atletismo, que aspira a crecer en el mundo de los e-sports. Desde Andalucía, donde reside, le desea suerte para el Mundial, que se disputará la próxima semana en Copenhague.
En pleno auge del sector, explica que siempre le gustó jugar hasta que se presentó esta oportunidad. «A mí me gustaba jugar en mi tiempo libre, él chico de Córdoba se puso a jugar y yo empecé a entrenar».
Pese a su poca experiencia en este mundillo, espera dedicarse algún día a esto. Entre los resultados cosechados hasta ahora, quedaron novenos de Europa en Copenhague además de clasificarse para el Mundial, aunque se quedaron fuera. «El objetivo es estar ahí luchando el próximo año».
Vinculado a la localidad de O Barco, donde pasó toda su infancia y adolescencia, guarda muy buenos recuerdos y busca ir siempre que puede. «Estuve en la Axencia Deportiva Galega, cubriendo al Centro de Deportes Barco, durante un año y pico»; donde jugó también como juvenil. Además, «sigo teniendo mi familia, aunque casi todos mis amigos ya están fuera», comenta. En la actualidad, vive en Linares, en Andalucía. Su deseo ahora pasa por poder convertir este hobby en un futuro próximo «en un trabajo». Y es que, además sabe idiomas, como inglés y francés.
De las cosas que más echa de menos de Valdeorras está ver a su familia y a los amigos. Pese a la distancia, Juan Manuel no pierde la oportunidad de seguir al CD Barco. «Espero que tarde o temprano consiga el ascenso», concluye. El equipo barquense, se quedó a las puertas del ascenso en la fase gallega.
