
Dos nuevos robos en locales comerciales de O Barco
Ocurrió la madrugada del martes. El ladrón se llevó un botín de 300 euros tras entrar en un bar y en una panadería del centro de la villa

La madrugada del martes, dos establecimientos de O Barco fueron objeto de sendos robos en un intervalo de apenas dos horas. Los hechos ocurrieron en el bar El Gato Negro, en la Avenida Eulogio Fernández, y en la panadería Pescadores, situada a unos 200 metros de distancia.
El primer aviso se produjo sobre las 04.00 horas, cuando se activó el sistema de alarma del bar El Gato Negro al detectar la presencia de un intruso. El ladrón accedió al interior forzando una pequeña ventana horizontal ubicada en lo alto del escaparate. Según las primeras investigaciones, utilizó algún objeto como un destornillador para forzarla y todo indica que necesitó subirse a un punto elevado, quizá un contenedor cercano, para alcanzarla.
Una vez dentro, el sonido de la alarma lo obligó a actuar con rapidez. Robó la recaudación de una máquina de dardos, varios rascas de la ONCE ya premiados y algo de dinero en efectivo que había en la caja. En total, el botín rondará los 100 euros. La alarma, conectada directamente con la Guardia Civil, permitió que una patrulla acudiera al lugar antes incluso que el propietario. Las cámaras de seguridad grabaron toda la secuencia.
Poco después, sobre las 06.30 horas, se produjo otro robo, esta vez en la panadería Pescadores. El dueño se encontraba en la zona del horno, en la parte baja del local, donde trabaja desde primera hora. La puerta trasera estaba abierta, tanto para ventilar como para permitir el acceso de clientes habituales antes de la apertura oficial.
El ladrón entró por esa puerta sin ser detectado y accedió directamente a la tienda. Allí se dirigió a la caja registradora y se llevó los 200 euros que suelen dejar preparados para el cambio. Nadie advirtió su presencia hasta que, a las 07.00 horas, la camarera llegó al local y notó la ausencia del dinero. Tras revisar las cámaras de seguridad, comprobaron que habían sido víctimas de un robo.
Ambos propietarios han presentado ya denuncia ante la Guardia Civil y confían en que las imágenes grabadas por los sistemas de videovigilancia permitan identificar y detener al autor de los hechos.