Las actividades de la Ruta del Vino de Valdeorras regresan con fuerza y con una propuesta que ya ha colgado el cartel de completo. «Sabores de invierno» es la experiencia donde se fusionan los vinos de la Denominación de Origen con tapas especialmente diseñadas para la ocasión.
La enóloga Cecilia Fernández, encargada de guiar la cata, explica que la selección se ha realizado con un criterio claro: maridar vinos de la zona con productos gastronómicos típicos del invierno en Valdeorras. «Buscamos reflejar la riqueza gastronómica de la comarca en una cata más íntima y especial», comenta.
El evento forma parte de una nueva estrategia dentro de la Ruta del Vino, que se ha propuesto organizar una actividad mensual para dar visibilidad tanto a los vinos como a los establecimientos que forman parte de la iniciativa. Y el estreno no ha podido tener mejor acogida: «Las reservas se agotaron una semana antes del evento, y sigue habiendo gente interesada en participar», señala Fernández, lo que abre la puerta a futuras ediciones o a propuestas similares para otras estaciones del año.
En esta ocasión, los asistentes podrán degustar tres vinos especialmente seleccionados para acompañar las tapas creadas por la cocina de Oliver en la Calzada de Vilamartín. «Más que una sorpresa, la cata busca confirmar que el maridaje es perfecto», añade la enóloga. La actividad también busca acercar la cultura del vino al público, demostrando que disfrutar de un buen godello o mencía es mucho más que tomarse una copa.
La Ruta del Vino ya trabaja en su siguiente propuesta para marzo, que incluirá un paseo por Petín. «Queremos que se conozcan todas las bodegas y locales que forman parte de la ruta y que la gente se anime a participar en nuestras actividades», adelanta Fernández.
Con «Sabores de invierno» como punto de partida, la Ruta del Vino de Valdeorras arranca el año con un éxito rotundo, consolidándose como un plan imprescindible para los amantes del buen vino y la gastronomía local.
