El Concello de A Rúa ha dado un "lavado" de cara al antiguo lavadero de A Rúa Vella. Se trata de un lugar de encuentro con una gran historia para los vecinos y vecinas y que, además, se encuentra junto a la Iglesia de Santo Estevo.
Los operarios, con ayuda del obradoiro de empleo Laború, realizaron tareas de saneamiento en la cal, que como explica el alcalde, Álvaro Fernández, «se estaba cayendo». Además, se pintaron las paredes y se dejó una parte de piedra vista. «Cuando las cosas están tan mal, parece que a poco que hagas, es muchísimo».
La propia pila, que antiguamente ejercía las labores de lavadero para el pueblo, «no se ha tocado, porque está protegido por patrimonio».
También se mejoró la zona superior, una especie de "balcón", donde las jardineras han compartido su espacio para convertirse en bancos. Un lugar que ahora disfrutan los vecinos como zona de encuentro y recreo, pero también como manantial para recoger el agua que da su fuente.
Ahora, se trabaja en la fuente de vilela y en la plaza, que se encontraba «totalmente abandonada por una situación que venía de años atrás. Ahora, la acometimos como nos gustaría». En ella se han quitado y pintado las barandillas, los bancos, las farolas... «Ha sido un muy buen trabajo de los operarios y el obradoiro». El regidor ha destacado el buen hacer de estas personas que se encuentran en formación y adelanta que el concello se presentará a la nueva convocatoria, que saldrá en las próximas semanas.
