El Belén de la iglesia de San Esteban de A Rúa es una impresionante representación del nacimiento de Jesús, destacando por su antigüedad y su cuidadosa elaboración. Realizado por Manolo, Elena, Pili, Paqui, Toña, Carmen, Lucía, Luis y Carlos, este belén se caracteriza por sus figuras de gran tamaño, que datan del año 52, y que capturan la atención de quienes lo visitan.
Una de las particularidades de este belén es que "es natural al cien por cien". Todos los elementos de la ambientación proceden de la naturaleza como musgo, cepas, serrín, madera, piedras y corcho. «No hay nada artificial», esgrime Manuel Martínez. Además, se juega con los tamaños de las figuras, las más pequeñas en la parte de atrás para "darle profundidad de campo al nacimiento y crear un efecto de infinito".
Los caminos que llevan al Portal de Belén, representando rutas de Oriente, monte y pueblo, simbolizan la diversidad y la unidad de la comunidad en este importante momento de la tradición cristiana. Cada sendero que conduce al portal refleja la convergencia de diversas culturas y seres humanos hacia un mismo propósito.
Destaca alguna de las piezas como «la hilandera y un hombre que va tirando por un asno», que llaman mucho la atención y resultan simpáticas para el público que acude a visitarlo. Otra de las atracciones es el estanque con peces vivos, donde los más pequeños se pasan la mayor parte del tiempo intentando verlos.
