
El alcalde de A Gudiña, Néstor Ogando, se mostró satisfecho tras la reunión mantenida el pasado miércoles con responsables de Renfe en Madrid, en la que trataron el tema de la supresión de paradas del tren en la estación Porta de Galicia. Ogando aseguró que se ha abierto una vía de negociación para evitar el recorte de frecuencias. Aunque la compañía mantiene su plan de suprimir tres paradas diarias a partir del 9 de junio, el alcalde afirma que «no hubo un no rotundo» y que Renfe se mostró dispuesta a revisar parte de los horarios si se alcanzan acuerdos razonables.
La propuesta del Concello pasa por conservar al menos el tren de las 8:28 hacia Madrid, clave para quienes necesitan hacer gestiones o regresar en el día. «El AVE no puede servir solo para ir a tomar el vermú», ironiza el regidor, en alusión al primer tren que quedaría disponible si se mantiene el plan actual: el de las 10:02. En sentido contrario, pide preservar la llegada desde Madrid a las 8:30 o, como mínimo, una alternativa anterior a las nueve de la mañana, que permita moverse a Santiago o A Coruña sin perder toda la jornada.
La reunión, que comenzó con el director general de presidencia, Sergio Bueno, y terminó con una hora larga de conversación con el presidente de Renfe, Álvaro Fernández, fue calificada como «cordial» por Ogando. El regidor, acompañado por la alcaldesa de Vilardevós, Eva Pérez, transmitió la necesidad urgente de mantener servicios útiles en una estación que superó los 52.000 viajeros el año pasado.
Paralelamente a esta negociación, crece el respaldo institucional. Las organizaciones empresariales AEVA y CEO se han sumado esta semana al rechazo generalizado con un comunicado conjunto en el que piden una mesa institucional con Renfe, ADIF, la Xunta, la Diputación y los concellos afectados. Alertan de que el recorte supondría un paso atrás para la competitividad y los servicios en zonas rurales ya castigadas por la despoblación.
El respaldo institucional también se ha extendido al ámbito turístico y comarcal. La Comisión de Seguimiento y la Mesa de Calidade del Xeodestino Trevinca-Valdeorras, que agrupa a nueve concellos de la comarca, acordaron por unanimidad sumarse a las reivindicaciones contra el recorte del AVE. En la reunión, celebrada este jueves en O Barco y presidida por el presidente del Inorde, Rosendo Fernández, se advirtió del «prexuízo económico, de conectividade e estratéxico» que supondría la supresión de paradas para el conjunto del territorio. La iniciativa partió de la Ruta do Viño de Valdeorras y fue respaldada por el Grupo de Desenvolvemento Rural (GDR), la Asociación Empresarial de Valdeorras y otros representantes del sector turístico.
También los partidos políticos han movido ficha. El Partido Popular ha presentado iniciativas en el Congreso y en la Diputación, donde logró el apoyo unánime del resto de grupos. El BNG ha registrado preguntas en el Senado, y el PSOE ha expresado su oposición desde la Diputación de Ourense. Todos coinciden en que los nuevos horarios anulan la funcionalidad del servicio, al impedir los desplazamientos de ida y vuelta en el mismo día.
El sábado pasado, la plaza de A Gudiña acogió la primera protesta ciudadana. Decenas de vecinos, representantes del PP, PSOE y BNG, y más de treinta alcaldes de Galicia, Castilla y León y Portugal participaron en una concentración convocada por el Concello. Ogando ya ha contactado con el alcalde de Puebla de Sanabria para coordinar nuevas acciones y propondrá, además, crear una plataforma comarcal en defensa del tren.
«Si dejamos de luchar, nos olvidan», advierte. De momento, las gestiones políticas, empresariales y sociales siguen en marcha. Ahora, la pelota está en el tejado de Renfe.