viernes. 29.03.2024

Julia Navarro habla de la novela como una historia sobre el desarraigo y la búsqueda de la identidad con el integrismo religioso como telón de fondo.

Un sábado más, Isabel Gavela, de Librería Praxis, nos trae la novela recomendada para esta semana, que en esta ocasión es “De ninguna parte” de Julia Navarro. Además, ha informado de la lista de los libros más vendidos en la tienda:

  1. De ninguna parte, de Julia Navarro
  2. Los vencejos, de Fernando Aramburo
  3. Donde haya tinieblas, de Manuel Ríos Sanmartín
  4. Los años extraordinarios, de Rodrigo Cortés
  5. Lo que la marea esconde, de María Oruña

"De ninguna parte"

Narra el viaje de dos hombres en la búsqueda de su identidad. Uno de ellos es Abir Nasr, quien presencia el asesinato de su familia durante una misión del ejército israelí en el sur de Líbano y jura ante los cadáveres de su madre y su hermana pequeña que perseguirá a los culpables durante el resto de su vida.



El otro protagonista es Jacob Baudin, uno de los soldados que han participado en la acción mientras cumplía con el servicio militar obligatorio. Abir y su hermano Ismail se trasladan a Francia a vivir con unos tíos que los acogen y que tienen otros dos hijos, una chica, Noura, que en el instituto se hace llamar Nora, y está completamente adaptada a las costumbres occidentales; y un hijo que como su padre es un radical islamista.



En este contexto se van a desarrollar los primeros años de la historia, en la que vemos a un Abir que intenta ser uno más de los muchachos del liceo Francés en el que estudian, pero siempre hay un pero, es tan solo un árabe.

Al mismo tiempo, y de forma paralela nos va contando la historia de Jacob, un chico hijo de un francés y de una judía, que pasa de vivir en Francia a Israel, a causa de la muerte de su padre. Allí como todos los israelitas, tiene que hacer el servicio militar, y participar en las misiones que se le encomiendan, cosa que no hace con mucho agrado.

La vida de ambos se narra en dos planos temporales distintos, pero uno y otro van a ir convergiendo en la actualidad. Como os decía Jacob ha participado en el escuadrón que deja huérfanos a Abir e Ismail. No es esa la intención de la misión, pero son "daños colaterales”. En la huida de los pequeños se cruzan las miradas de ambos y esta mirada los va a perseguir toda la vida.

Los dos se están preparando para algo importante. Y esto hará que se vuelvan a cruzar años más tarde en Bruselas bajo el humo de las bombas con las que El Círculo, una organización islamista, siembra el terror en el corazón de Europa.



Y aquí reconocemos esa época en que los atentados recorrieron toda Europa, Barcelona, París, Bruselas…. Y nos da un toque de atención como en su anterior libro, "Dispara yo ya estoy muerto”, para que pensemos en que lleva a uno y al otro a obrar como lo han hecho, y en la necesidad de reflexionar sobre esas certezas que todos tenemos, unas más peligrosas que otras, y que en este caso tienen como fin, en nombre de “un Dios”, atentar contra la vida de otros seres humanos, cuyo único pecado es tener otras convicciones y otro estilo de vida, y estar en un lugar a una hora determinado.

Isabel Gavela recomienda "De ninguna parte", de Julia Navarro