
La psicóloga Vicky Valsechi habla sobre los síntomas y remedios ante el miedo a salir de casa, el Síndrome de la Cabaña
Segunda semana de Fase 1. Más de sesenta días de encierro en casa. Hay quien ha ido a comprar, a la farmacia o al kiosco, pero también quien no ha puesto un pie en la calle desde que se decretó el Estado de Alarma. Y puede que algunos de ellos no quieran hacerlo a pesar de que el Gobierno ha levantado la reclusión. Es el llamado Síndrome de la Cabaña.
La psicóloga Vicky Valsechi señala que esta fase de desescalada genera, a muchas personas, un miedo intenso a cambiar de entorno. «Primero nos costó el encierro pero el ser humano es adaptable y ahora nos hemos acostumbrado a ese lugar seguro y que podemos controlar», ha destacado la psicóloga quien matiza que para muchas personas la salida al exterior, que antes era cotidiana, ahora provoca miedo. «Nos genera un estado de ansiedad a realizar actividades que eran cotidianas: viajar en transporte público, trabajar, relacionarnos con otras personas…A veces es incapacitante», detalla.
Este síndrome no es un trastorno psicológico sino una consecuencia natural de estar tiempo confinados. Surgió cuando los colonos americanos vivían encerrados largos periodos de tiempo en su cabañas en Minessota. En ese momento tenían depresión, ansiedad…Muchos los llaman locura de la montaña y lo sufren personas privadas de su libertad como presos o enfermos por un periodo prologado.
Cierto es, tal y como recuerda la profesional, que no afecta a todo el mundo sino a aquellos que perciben el peligro en la salida. Los síntomas pueden ser dificultades en la concentración, déficit de memoria así como ansiedad, angustia, temor, irritabilidad, impaciencia o frustración. La alteración en el ritmo del sueño, la sensación de cansancio, la desgana y el letargo son otras de las consecuencias así como un menor rendimiento académico o laboral.
Para luchar contra esta sensación, la psicóloga recomienda en casa llevar una rutina lo más parecida al horario que teníamos antes combinado con una alimentación sana así como mantener el contacto social con familiares y amigos.
Al salir recomienda hacerlo a espacios abiertos en los que vamos a tener una sensación placentera. Aconseja además que esas salidas sean graduales de tal modo que las personas las puedan controlar. «Cuando vea que lo que generaba poca ansiedad ya está superado debe ir aumentando la exposición siempre respetando los protocolos de seguridad como son la distancia social, mascarilla y lavado de manos. Vamos a salir de manera responsable con nosotros mismos y con los demás», detalla la psicóloga.
Por último recomienda planificar las actividades de salida y hacerlo de manera gradual. «Tenemos que expresar los miedos y las emociones negativas. Esta sensación es inédita para todos y tenemos que confiar en nuestras propias capacidades», ultima.
En caso de que persistan los síntomas o que sean incapacitantes es cuando debemos acudir a un profesional, «pero es una consecuencia natural», concluye.
Si quieres escuchar la entrevista completa puedes hacerlo aquí:
https://www.ivoox.com/sindrome-cabana-audios-mp3_rf_51074170_1.html