
En la madrugada del martes al miércoles, mientras las llamas avanzaban sin descanso por el oriente ourensano, tres alcaldes se mantuvieron en pie, en la carretera o junto a un teléfono, pendientes de cada cambio de viento. No fue una noche de despacho, sino de botas, linternas y decisiones rápidas.
En Manzaneda, Amable Fernández no puede disimular la indignación. El incendio que amenazó la estación de montaña no fue un accidente. «Lo plantaron ahí. La pena es que el que plantó no se quedara pegado al suelo», lamenta. El fuego comenzó a apenas un centenar de metros de la entrada, en una zona de fácil acceso, y obligó a confinar a 300 personas, entre ellas 170 niños de un campamento. Mientras los efectivos luchaban contra las llamas, el regidor y vecinos rescataban a 300 reses atrapadas en un curro. «A las cuatro de la mañana estaban todas a salvo», recuerda.
En A Pobra de Trives, Patricia Domínguez describe una noche de nervios y coordinación. Evacuaciones en Somoza y Pena Petada, un foco que llegó hasta el cementerio de Barrio, dos casas reducidas a cenizas en A Nagaza y un susto mayúsculo cuando el fuego se reactivó junto a un hotel y saltó la carretera. «La zona quedó calcinada, las rocas estallaban del calor», cuenta. Su mensaje es claro: «Cuando los medios no son suficientes, hay que pedir ayuda, venga de donde venga, para salvar vidas, casas, animales y nuestro monte».
En San Xoán de Río, Xosé Miguel Pérez pasó la noche en vilo pendiente de que el fuego no saltara el río Navea y alcanzara su término municipal. La UME estuvo en la zona revisando el pabellón por si era necesario albergar evacuados o personal de emergencias. «Era como vivir nun forno. Nin sequera de noite baixou a temperatura, e o vento cambiaba cada pouco.», explica. En mente tenía sobre todo a los vecinos de los pueblos más cercanos al frente. «Tiñamos preparado un plan para evacuar se era necesario. A seguridade de todas as persoas está por riba de todo». Suspendió sin dudar la III Festa da Tenreira y otras actividades previstas.
Y todo indica que las próximas noches seguirán en vilo ya que aún son varios los focos que continúan activos en la zona y las condiciones meteorológicas no ayudan.