Doce miembros del club realizaron los 20,4 kilómetros que separan Montefurado de San Clodio
El sábado 30 de marzo, los participantes en la caminata del cuarto tramo del Camiño de Inverno quedaban a las 8:30 de la mañana en la plaza del Concello de O Barco para desplazarse en vehículos particulares hasta Montefurado donde completaron, el pasado 16 de marzo la tercera etapa.
Bajo la dirección de Ceferina, partieron de la iglesia de Montefurado hacia Bendilló, desde donde bajaron a la Farrapa. Parada en la capilla y el molino de aceite. Desde allí a O Soldón desde donde siguieron paralelos al Sil hasta la aldea de Sequeiros y desde allí Os Novaes.
Visita a Torre Novais y a la pequeña y acogedora iglesia que está en la plaza. O Castelo dos Novais es otro lugar emblemático de la etapa. Se trata de un castillo-fortaleza, levantado sobre un castro, que fue residencia de la Orden Hospitalaria de los Caballeros de San Juan, quienes habían establecido una encomienda en la tierra quiroguesa. Su presencia en Quiroga, controlando el camino que venía por el Sil, Camino de Invierno, y, el hecho de que la Encomienda de Quiroga fuera la más importante de sus posesiones gallegas, abarcando desde el Sil hasta las tierras del Incio.
Desde Os Novais tomaron el Camiño Real, una calzada romana que conserva en muchos tramos aún el adoquín de la época. Atravesaron el puente Medieval de Ponte Pedriña y desde allí subida para luego bajar a A Encomenda y desde allí a Quiroga.
Una parada y vuelta al camino para completar la etapa en San Clodio, donde les espera el presidente, Miguel Cal. Recordamos que está convaleciente tras el esguince sufrido en la senda verde de A Veiga.
Fotos cedidas por el Club Peña Trevinca