Vilamartín convoca a los concellos afectados por los arrastres para acordar una respuesta conjunta
Tras semanas de captaciones colapsadas por lodos y ceniza, la situación ha llevado al Concello de Vilamartín a dar un paso que hasta ahora no se había planteado: coordinarse con otros alcaldes para actuar de forma conjunta y plantear una movilización si las administraciones superiores no intervienen.
La reunión que el alcalde de Vilamartín, Enrique Álvarez Barreiro, mantuvo con los vecinos de Arcos marcó ese punto de inflexión. Según explica, la preocupación vecinal ha ido creciendo al ver que el agua continúa entrando sucia en las captaciones y que las administraciones no están aportando las soluciones que la comarca necesita. «Os veciños están moi preocupados e pretendían que eu explicase cal era a situación, como estaba agora mesmo e que é o que iamos facer de cara ao futuro», señala.
En ese encuentro, los propios vecinos plantearon la posibilidad de salir a la calle. Y el alcalde la comparte. «Os veciños están enfadados… deberiamos poñernos de acordo entre os concellos afectados e saír á rúa para dicir alto e claro que as administracións superiores teñen a obriga de atender esta situación».
Un frente común: Vilamartín, Petín, A Rúa y O Barco
El regidor confirma que ya ha hablado con los alcaldes de Petín, A Rúa y O Barco, que sufren problemas similares desde los incendios. Todos ellos están dispuestos a coordinarse. «Estes concellos temos o problema e estamos dispostos a saír á rúa», afirma.
La primera cita ya está fijada: este lunes, los alcaldes se reunirán para valorar conjuntamente los pasos a seguir y decidir cómo exigir de forma efectiva una intervención urgente. «A intención é, máis pronto que tarde, saír á rúa, porque a situación non somos capaces de resolvela e necesitamos axuda de urxencia», explica el alcalde.
No se trata solo de presión: es la constatación de que los concellos pequeños no pueden asumir solos la magnitud del problema. «Os veciños non teñen por que estar pasando por esta situación se iso se pode arranxar», insiste.
«Non buscamos culpables, buscamos solucións»
Uno de los mensajes más repetidos por Álvarez Barreiros es que la prioridad no es señalar responsables, sino conseguir actuaciones inmediatas. El alcalde lo expresa con claridad meridiana: «Non estamos buscando culpables, estamos buscando solucións». Y añade: «Culpables, evidentemente, somos todos, e quen non o queira ver é problema del».
Ese planteamiento —centrado en la responsabilidad compartida y en la necesidad de actuar— contrasta con la última reunión mantenida con la Xunta, que, según relata, fue cordial pero sin avances. «Non saíu absolutamente nada concreto, nada máis que culparse uns aos outros», lamenta.
Mientras tanto, las lluvias siguen arrastrando ceniza y las captaciones continúan entrando en carga con cada episodio intenso. El Concello de Vilamartín trabaja en soluciones de urgencia, como la puesta en marcha de una nueva depuradora en un mes y la siembra de vegetación en manantiales para frenar arrastres. Pero el propio alcalde reconoce que eso no bastará.
Por eso, por primera vez desde los incendios, Vilamartín no afronta la crisis del agua en solitario. Lo hace junto a otros tres concellos que comparten el mismo problema y que el lunes decidirán si la respuesta conjunta pasa también por la calle.
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