El lobo vuelve a ser motivo de preocupación en San Xoán de Río. Este 14 de enero, los diputados del Grupo Popular, Miguel Viso y Cristina Campero, visitaron esta localidad de las comarcas de Terras de Trives y Caldelas para reunirse con ganaderos que lidian a diario con los ataques de este animal. Entre relatos de pérdidas y temor, el mensaje fue claro: necesitan apoyo y soluciones urgentes.
Acompañados por el alcalde de San Xoán de Río, Xosé Miguel Pérez Blecua, y el portavoz del PP en Castro Caldelas, César Enríquez Diéguez, los diputados quisieron recordar que el sector tiene hasta el 23 de enero para solicitar las ayudas que ofrece la Xunta de Galicia para minimizar el impacto de estos ataques.
Los ganaderos pueden optar a subvenciones de hasta 400.000 euros para instalar vallados fijos en sus explotaciones. Estas ayudas están dirigidas a propietarios de ganado bovino, ovino, caprino, porcino de raza celta y equino que figuren en el Registro General de Explotaciones Ganaderas de Galicia (Rega).
Además, con una partida de 570.000 euros, la Xunta también ofrece apoyo para contratar personal especializado en el manejo y pastoreo del ganado, una medida especialmente pensada para proteger los rebaños más vulnerables.
«La protección del lobo no puede ser ideológica»
Durante el encuentro, Miguel Viso criticó la inclusión del lobo en la Lista de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre), una decisión que, según él, responde «únicamente a criterios culturales e ideológicos» y no a datos objetivos. Viso insistió en que esta medida, adoptada por el Gobierno central en septiembre de 2021, ha agravado la situación en Galicia. Desde entonces, los avisos por ataques han aumentado un 72 % y el número de reses afectadas se ha disparado un 57 %.
A pesar de este impacto, los datos de la Xunta reflejan que la población de lobos en Galicia se mantiene estable, con alrededor de 93 manadas identificadas. Sin embargo, para los ganaderos de San Xoán de Río, esta estabilidad no es consuelo. El daño a sus explotaciones y el esfuerzo diario por proteger a su ganado hacen que la situación sea cada vez más insostenible.
Los diputados concluyeron su visita reiterando su apoyo al sector y pidiendo al Gobierno central que reconsidere su decisión sobre el Lespre. «No se trata de elegir entre la biodiversidad y la ganadería», señaló Viso, «sino de buscar un equilibrio que proteja tanto al lobo como a las familias que dependen de su ganado».
En San Xoán de Río, los ganaderos esperan que sus demandas no caigan en saco roto y que se tomen medidas que garanticen su sustento. Mientras tanto, el reloj sigue corriendo: las ayudas están sobre la mesa, pero solo hasta el 23 de enero.
