Ocurrió sobre las diez y cuarto de la mañana. El suceso fue presenciado por varias personas que paseaban en ese momento por el puente de la Barca, en la ribera del Sil y desde los balcones cercanos. Una niña dio la voz de alarma al ver a un hombre que se caía al río. En pocos minutos, un grupo de curiosos se agolpó en la zona, y comprobaron que el hombre se encontraba inmóvil en el Sil, hasta que uno de los presentes, Haisbert Arias, que vive en la zona, decidió actuar.
«Vi que el hombre estaba boca abajo y todos pensábamos que estaba muerto, pero de repente movió un brazo. Entonces me quité la ropa y me lancé al río», relató Arias, que protagonizó el rescate. El hombre nadó hasta el centro del cauce, arrastró al afectado hacia la orilla y, ya en tierra, recibió la ayuda de la Policía Local, que ya se encontraba en la zona y de la gente allí concentrada, para sacarlo. «Me resultaba imposible subirlo yo solo desde el agua, menos mal que me ayudaron», comentó Arias, tras la intervención
Una vez en tierra, todos los presentes comprobaron que el hombre rescatado mostraba signos de respiración cuando fue auxiliado, aunque se encontraba en estado muy débil. Los servicios de emergencia del 061 se hicieron cargo de su atención. Hasta el momento no ha trascendido qué le sucedió al hombre para perder el conocimiento en el agua.
