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Ni el vino más fresco pudo aliviar el calor que caía a plomo sobre el escenario de la XXVI Feira do Viño de Valdeorras, donde las autoridades pasaron casi una hora bajo un sol abrasador, aguantando estoicamente hasta que les tocó hablar… y terminaron de hacerlo el resto.
El público, no muy numeroso, buscaba desesperado un resquicio de sombra, y los que no lo encontraban se iban retirando entre abanicos y botellas de agua. La cita arrancó con una retahíla de intervenciones en las que no faltaron reivindicaciones, anuncios y declaraciones de amor al godello.
El encargado de abrir el acto fue Marcos Prada Ginzo, presidente del Consello Regulador da Denominación de Origen Valdeorras, quien destacó con orgullo que esta es la única D.O. de España integrada en el selecto grupo de colaboradores esenciales de la prestigiosa institución formativa WSET.
«O godello non era unha moda», afirmó, recordando que en 2024 se recogieron más de 6 millones de kilos de esta variedad, lo que supuso un récord absoluto. También celebró el 80 aniversario de la denominación y el 50 del Plan Revival, clave en la recuperación del godello.
Le siguió María del Carmen González Quintela, delegada especial da Deputación para Valdeorras, quien anunció que la Deputación de Ourense acaba de aprobar la financiación de la segunda fase de la reforma de la sede del Consello Regulador y reiteró su compromiso con la promoción de los vinos a nivel nacional e internacional. No dudó en afirmar que «o godello de Valdeorras é o mellor viño branco do mundo» y agradeció a la pregonera Teresa Portela su presencia, conectando el piragüismo con la comarca y el Descenso Internacional do Sil.
El director Xeral de Turismo de Galicia, Xosé Merelles, destacó que la Feira es «o escaparate máis importante dos viños de Valdeorras» y recordó que la Xunta ha invertido más de 2,8 millones de euros en iniciativas de enoturismo en la comarca en los últimos dos años. Detalló proyectos como la Ruta do Viño Milenaria, con 1,5 millones cofinanciados por la UE, ayudas para enogastronomía, mejora de recursos turísticos y actuaciones en el Camiño de Inverno.
Por su parte, la conselleira do Medio Rural, María José Gómez, subrayó que los vinos de Valdeorras son «reflexo da alma e da historia desta terra» y defendió la viticultura como herramienta de conservación del medio ambiente y fijación de población.
Reivindicó el papel de la godello como «peza clave do éxito nacional e internacional» y puso como ejemplo el Guitián fermentado en barrica de la adega A Tapada, premiado como mejor vino blanco de España en 2024. «Esta comarca, a súa xente e os seus viños son os mellores embaixadores de Galicia», concluyó.
El alcalde de O Barco, Alfredo García Rodríguez, ofreció un discurso más distendido, en el que reivindicó el papel de la viticultura como modo de vida en la comarca y recordó que «hai que pedir Godello de Valdeorras, porque hai diferenzas». También lanzó un llamamiento a las bodegas que elaboran en Valdeorras pero no participan en la feria para que se impliquen. Y, como cada año, aprovechó para bromear sobre el calor: «Sempre nos poñen a pleno sol. Queren matarnos».
En representación del Goberno de España intervino el delegado en Galicia, Pedro Blanco Domínguez, con un mensaje institucional y datos concretos: el Gobierno ha destinado 25 millones de euros al sector del vino en Galicia, incluyendo 10 millones en 2024 a través de la Intervención Sectorial Vitivinícola de la nueva PAC, y 5,2 millones del PERTE agroalimentario. «Estamos ante un sector estratéxico e moderno que merece todo o apoio», afirmó.
En el escenario también estuvo presente el subdelegado del Gobierno en Ourense, Eladio Santos, aunque en este caso no intervino públicamente.
Antes de que arrancara el acto oficial, el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, hizo declaraciones a los medios en las que advirtió sobre la amenaza de los aranceles de EE. UU. a las exportaciones de vino gallego (que en gran parte dependen del mercado estadounidense) y reclamó a la Xunta que actúe y complemente las medidas del Gobierno central. «O viño non só xera riqueza, tamén combate o despoboamento», subrayó.
La presencia institucional fue amplia y transversal. Entre el público se encontraba la mayoría de los alcaldes y alcaldesas de la comarca, entre ellos Juan Anta (A Veiga), Xosé Miguel Pérez (San Xoán de Río), Patricia Lamela (Larouco) y Elías Rodríguez (Rubiá). También acudió el socialista Alberto Vázquez (O Bolo), y María González Albert (A Rúa), junto al diputado del BNG Secundino Fernández. Del Concello de O Barco asistieron Aurentino Alonso, concelleiro de Cultura e Deporte, y Margarita Pizcueta, responsable de Cultura y Educación, junto a practicamente todos los concelleiros tanto del equipo de gobierno como de la oposición.
Tras la larga ronda de intervenciones institucionales, el protagonismo pasó a manos de la pregonera: la piragüista Teresa Portela, olímpica en siete ocasiones, quien estableció una metáfora entre el mundo del vino y del deporte, por las similitudes en el trabajo y esfuerzo que requieren para convertirse en los mejores.
Tras su pregón, representantes del Club de Piragüismo de O Barco le hicieron entrega de varios recuerdos en agradecimiento por su presencia, cerrando así el acto inaugural con un gesto emotivo que conectó deporte, territorio y vino.
