La nebulosa de la burbuja es la última foto tomada por Francisco Javier Cerdán, el astrofotógrafo valdeorrés al que el confinamiento le sirvió para descubrir una espectacular afición.
Francisco Javier asegura que no conocía nada sobre las estrellas ni sobre la fotografía. «En el confinamiento compré mi primer telescopio y poco a poco fue ampliando campo. Al principio hacía las fotos poniendo el móvil en el objetivo del telescopio», admite mientras subraya que tampoco conocía el cielo, «siempre me gustó pero no sabía nada», explica este alicantino afincado en O Barco.
Internet ha sido su maestro para todos los campos, tanto para leer las estrellas como para hacer fotografía. «No conozco a nadie con quien salir o de quien pueda aprender por eso he tenido que recurrir a Internet», destaca mientras señalar que tomar fotografías lleva mucho tiempo. «Una sola imagen puede llevarme seis horas. Hay gente que quiere ampliar calidad y que hace exposiciones de 20 horas», subraya.
En esta aventura, Francisco Javier está acompañado por su pareja, Natalia Montero. «Ella me apoya mucho, me animo desde el principio y sigue dándome pie a comprar más material porque ve que tengo buen resultado. Me acompaña. Si no fuera por ella tendría un telescopio de juguete», afirma mientras recuerda que es un material caro e inabarcable.
Francisco Javier señala que el cielo de Valdeorras es impresionante. «Me gusta mucho el mirador de Viloira para hacer fotos de planetas, solar o luna. Pero para hacer fotos de nebulosas, galaxias…voy al Alto da Portela. Es un cielo que me gusta muchísimo».
Astronomía de Valdeorras es el nombre de su perfil en la red social Instagram donde muestra todas las fotografías que hace. «Quería dar a conocer a la gente de aquí como es de bonito este cielo», concluye.
Si quieres escuchar la entrevista completa, pincha aquí.
