El combustible está por las nubes. Esa es la conclusión a la que puede llegar el consumidor una vez que acude a repostar a la gasolinera con precios que se han encarecido más de un 20% en lo que va de año.
Concretamente la gasolina ha subido un 22,1% en lo que va de año, y el diésel un 23, con precios que pocos conductores recordarán.
En las estaciones de servicio de la comarca se pueden encontrar cifras que llegan hasta el 1,41 euros por litro para el diésel, y 1,52 para la gasolina. En ambos casos se trata del diésel normal, sin aditivos extras y la Sin Plomo de 95 octanos. El diésel extra se encuentra en el 1,48 euros, y la gasolina Sin Plomo de 98 octanos en 1,63.
1,29 euros para el diésel y 1,40 para la gasolina se pueden encontrar en la gasolinera más económica de la comarca situada en A Rúa.
Estas cifras están lejos del país vecino. En Portugal el diésel ronda el 1,80 euros, la gasolina Sin Plomo de 95 octanos el 1,90 mientras que la de 98 octanos superó por primera vez en la historia los 2 euros en algunas estaciones.
En está vorágine de escalada de los precios, está situación afectará a todos los sectores, desde el transporte hasta la alimentación.
