No es algo preocupante, pero sí una realidad. Los incendios que han desolado parte de Valdeorras durante el mes de julio han provocado que mucha fauna salvaje pierda su alimento, lo que les obliga a buscar otra fuentes de nutrición, como pueden ser las uvas.
Es cierto que los últimos días previos a que se inicie la vendimia, cuando la uva ya está madura, suele llamar la atención de los jabalíes, pero este año el "ataque" se ha adelantado. Como explica Jorge Mazaira, director técnico del Consello Regulador de la D.O. Valdeorras, «no es algo generalizado, pero sí se han visto racimos comidos no solo de jabalí, sino también de conejos, que atacan de forma más agresiva».
A esto se suma otro problema que todavía más importante, la sequía. Las tormentas de la semana pasada, y las lluvias previstas para la jornada de este martes «dan un alivio para llegar al final de la vendimia de forma adecuada». Eso sí, eso no evitará que la pérdida de cosecha ronde el 10%.
Con respecto al inicio de la vendimia, desde el Consello Regulador se estima que muchas bodegas ya estén en funcionamiento los últimos días de agosto. Ahora es momento de ultimar los detalles y buscar la mano de obra, una tarea que también se complica en ocasiones. «Se va a seguir con el mimos sistema, buscando temporeros de fuera. Cada vez es más difícil encontrar gente de la zona. Los estudiantes empiezan antes el curso y es difícil que puedan estar como se hacía antes».
