El concello de Carballeda tiene en estos momentos en marcha distintas actuaciones en diversas infraestructuras. Una de las más ilusionantes para su alcaldesa, María del Carmen González Quintela, es la primera fase de la renovación del parque infantil de Casaio, una obra imprescindible para que los pequeños tengan un «lugar donde jugar cuando visitan a sus abuelos».
La edil destacó además, que poco a poco se seguirá trabajando en esta espacio de ocio infantil incorporando elementos modernos y novedosos. Esta obra tiene especial relevancia para el municipio ahora que el rural no atraviesa su mejor momento y en el que la población envejece mientras los niños desaparecen. «Qué pena no ver a niños haciendo trastadas por los caminos», lamentó la alcaldesa de Carballeda.
Otra de las actuaciones que está a punto de comenzar es la integración de los contenedores en las calles del municipio. En este sentido, González comentó que desde el concello han ideado una obra novedosa que espera que sorprenda y guste a todos los vecinos «queremos crear espacios que expongan cómo era antes, lugares emblemáticos antiguos de como fue evolucionando el núcleo de Sobradelo en el camino de invierno». Esta obra se extenderá a otras zonas con el objetivo es recordar de donde «dónde vinimos, cómo éramos y a dónde iremos», puntualiza la alcaldesa de Carballeda.
En cuanto a otras actuaciones que ya terminadas o a punto, destacó las reparaciones y mejoras en distintos tramos de la carretera local de Carballeda a Pusmazán, los arreglos en un tramo de la Medua, la mejora de pluviales en Sobradelo, y la calle de la Galgueira y la renovación de las aceras en un tramo de la calle Villa Cristobo, entre otras.
Recuperándose del paso de Kirk
El concello trabaja también en reparar los daños causados por la borrasca Kirk, que dejó vientos huracanados de mas de 180km/h en la zona. La peor parte se la llevó el centro de desarrollo turístico de Fonte da Cova, que perdió parte del tejado. Actualmente los seguros ya han comenzado los trámites para que el edificio recuperar su aspecto original lo antes posible. González señaló que debido a la orografía de Carballeda, están acostumbrados a los efectos de los temporales y a trabajar con rapidez para solventarlos.
Invertir en el rural para asegurar su futuro
Durante la entrevista, González Quíntela aprovechó para hacer un llamamiento urgente a las instituciones y a la sociedad en general para que se invierta más en el rural y se fomente la repoblación de estas áreas, porque no es un problema solo de Carballeda, es un problema demográfico que afecta ya a toda Europa. «Estamos ante una 'Europa vaciada'. Cada vez vemos menos niños en los caminos, negocios que se cierran porque no hay relevo generacional… Es una pena», subrayó.
La alcaldesa insistió en que, aunque los concellos pueden hacer mucho para mejorar las condiciones de vida, el problema de fondo requiere una acción decidida desde las instituciones del Estado. Es necesario empezar a concienciar a la gente de que el «medio rural ofrece una calidad de vida distinta», una forma diferente de vivir. Y para que ese mensaje cale, es necesario, recordó, el apoyo institucional, políticas que impulsen esta forma de vida e incentivar a los jóvenes a no irse y a quedarse en el rural.
González comentó también que en estos momentos está trabajando, junto con el Grupo de Desarrollo Rural (GDR) que preside, en apoyar a los pequeños emprendedores para que apuestan por el rural. «A través del GDR estamos ayudando a crear negocios que dan vida al rural. Pequeñas tiendas o iniciativas que además de generar ingresos para una familia, fomentan la vida social en los pueblos. Es una labor lenta, pero estamos viendo resultados».
Cultura y tradiciones
Otra de las formas de revitalizar el rural, según la alcaldesa, es a través de la preservación de las tradiciones. Un ejemplo, explicó, es el Magosto, una muestra de cómo mantener el encanto del medio rural a través de fiestas que fomentan la convivencia y la cercanía entre los vecinos. «Estas celebraciones no solo son una oportunidad para reunirse, sino que permiten que la gente redescubra el valor del rural», destacó.
Para González Quíntela, es crucial que estas fiestas mantengan su carácter espontáneo y comunitario, y lamenta que en ocasiones se haya intervenido demasiado. «Es importante mantener lo que nos enseñaron nuestros antepasados, que los vecinos se reúnan, hagan una fogata y disfruten juntos. Esto es lo que hace que el medio rural sea diferente, y no debemos perder esa calidad humana», reflexionó.
María del Carmen González tiene claro que el futuro del rural pasa por una inversión decidida y un apoyo constante a las tradiciones, los pequeños negocios y las infraestructuras. «Estamos aquí para mejorar, para que la vida en el rural sea atractiva y viable. Y con el apoyo adecuado, estoy convencida de que lo conseguiremos», concluyó.
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